Mousse: Preparación cremosa y esponjosa, dulce o salada, hecha a base de un puré de diversos ingredientes mezclado con claras de huevo montadas, gelatina, nata (crema de leche)… se puede tomar caliente, fría o helada.
Baño María: Método empleado para conferir temperatura uniforme a una sustancia líquida o sólida, para calentarla lentamente o fundirla, sumergiendo el recipiente que la contiene en otro mayor con agua u otro líquido que se lleva a o está en ebullición.
El otro día haciendo limpieza, me encontré un libro, que no sabía que tenía, con recetas de mousses, saladas y dulces de lo mas ricas.
Os presento la primera elegida, una de chocolate blanco.
Aquí tenéis dos enlaces de mousse de chocolate negro:
Mousse de chocolate y Tarta mousse de chocolate.
Ingredientes: (Para diez o doce personas según tamaño moldes).
375 gr de chocolate blanco. Mi favorito es de Nestlé postres.
140 gr de azúcar.
500 ml de nata (crema de leche) para montar.
4 huevos.
3 cucharadas soperas de agua.
Para decorar: cacao en polvo, virutas chocolate…
Preparación:
Escogemos moldes individuales y un poco diferentes, para que parezca algo mas que una mousse.
Ponemos el brick de nata (crema de leche) en un bol grande con hielos, la metemos en la nevera por lo menos una hora antes de empezar a hacer la receta.
Sacamos el brick de nata (crema de leche) de los hielos, los tiramos, secamos el bol (que estará bien frío), vertemos la nata (crema de leche) en él y con ayuda de la batidora de varillas, la montamos bien. Reservamos en el frigorífico.
Troceamos las onzas de chocolate y las derretimos en un bol a baño María en el fuego. Removemos de vez en cuando hasta que el chocolate esté líquido.
En una olla pequeña, cocemos el azúcar con el agua. Detenemos la cocción en cuanto el azúcar empiece a espesar y antes de que cambie de color. Reservamos.
Batimos los huevos con las varillas, vertemos el azúcar hirviendo sobre ellos y seguimos batiendo hasta que la mezcla se enfríe.
Añadimos el chocolate fundido templado, mezclando rápidamente con la batidora. Incorporamos la nata montada (crema de leche) y mezclamos suavemente, con movimientos envolventes. Le cuesta mezclarse pero en unos minutos se consigue. Debe quedar una crema homogénea.
Quedará una mousse muy suave, vertemos en los moldes elegidos y dejaremos reposar en la nevera por lo menos 2 horas antes de su consumo.
Podemos decorar con virutas o pepitas de chocolate negro, almendras crocantes,
bolitas multicolores, corazones de colores, cacao en polvo…
En fin ¡ viva la imaginación!
Consejo: He hecho la mousse la víspera de su consumo. Se sirve fresquita de la nevera, en moldes individuales y un poco distintos. Si la hacemos de chocolate negro, pondremos un poco mas de azúcar porque es mas amargo. La he decorado con virutas de chocolate, este elemento de decoración, a mi, me da mucho juego.
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