Este es uno de mis postres favoritos.
Tengo muchos postres favorito jajaja, pero las natillas son de esos postres que me llevan a mi infancia. Recuerdo como mi madre hacía natillas en un cazo de aluminio y allí estábamos mis hermanos y yo esperando para que las vertiera en los platos para coger el cazo y rebañar con el dedo los restos que quedaban en él.
Casi me gustaba mas esos restos calientes, aun cremosos que las propias natillas que no nos dejaban probar hasta que no se habían enfriado bien, "caliente no, que te va a doler la barriga" nos decía siempre mi madre...
Hoy hago yo las natillas, no uso un cazo de aluminio, sino la thermomix, pero sigo rebañando el vaso cuando acabo.
Lo que pasa es que las natillas de hoy son algo especiales. Están hechas con leche de soja, para que puedan ser consumidas por personas con intolerancias o alergias a la leche. Este era uno de los requisitos que nos exigían las chicas de La Cocina Typical Spanish para el reto de este mes, que la receta fuera sin lácteos #sinlacteosTS
Y el otro requisito, el mas importante, que fuera una receta típica de nuestra gastronomía. Y estas natillas cumplen los dos requisitos al 100%.
INGREDIENTES:
3 huevos
120 gr de azúcar
1 cucharada de azúcar vainillado
500 ml de leche de soja (o de cualquier otra clase de leche vegetal)
1 cucharada sopera de harina de maíz
canela para adornar
PREPARACIÓN:
CON THERMOMIX:
Vamos a poner todos los ingredientes (menos la canela) en el vaso de la themomix. Mezclamos 10 segundos a velocidad 4. A continuación y programamos 8 minutos a 90º y velocidad 2.
Si hay algo de espuma, programamos 2 minutos a 90º a velocidad 2. Si no hubiera espuma solo mezclamos 2 minutos a velocidad 2.
SIN THERMOMIX:
Es una receta muy simple. Ponemos todos los ingredientes en un cazo, los batimos bien para que no haya grumos y calentamos a fuego medio, removiendo constantemente hasta que veamos que han tomado una consistencia cremosa y espesa.
Ponemos los huevos y las dos clases de azúcar en el vaso de la thermomix.
Añadimos la leche de soja y la harina de maíz. Batimos unos segundos y cocinamos.
Vertemos en los cuencos y dejamos enfriar.
Y servimos adornadas con un poquito de canela.
¡Quedaron tan ricas!
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Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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