En las cartas de muchos restaurantes los gnocchi (ñoquis) aparecen en el apartado de las pastas cuando, en realidad, el ingrediente principal es la patata y su elaboración y preparación difiere de la infinidad de pastas que tiene la cocina italiana. Los gnocchi tienen un origen revolucionario, contestatario. Hacia finales del siglo XIX y ante el abusivo aumento de precios que impusieron los propietarios de los molinos donde los campesinos llevaban su trigo a moler para convertirlo en harina con la que elaborar sus pastas, éstos se plantaron y comenzaron a experimentar con un producto llegado a su país de allende los mares: la patata. Para hacer los ñoquis siguieron usando harina, pero en mucha menor cantidad. A los propietarios de los molinos les salió el tiro por la culata, pero ya era tarde porque el pueblo había inventado un nuevo plato con el que paliar la hambruna. Vemos, pues, que los ñoquis son un antecedente de lo que luego se ha dado en llamar cocina de fusión ya que mezclan la patata y la harina de trigo, productos del Nuevo Mundo y del Viejo Continente. Luego, los ñoquis hicieron el viaje de vuelta. De Italia volvieron a Estados Unidos y Sudamérica de la mano de los muchos emigrantes italianos que buscaron fortuna lejos de su tierra.
La base fundamental de los ñoquis son la patata, la harina y el huevo, amasados y hervidos en agua con sal. Comidos así, sin más, suelen ser sosos por lo que se hace imprescindible acompañarlos de una buena salsa; y en cuestión de salsas la imaginación es libre.
RECETA
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INGREDIENTES (para 4 personas)
700 g de patatas para hervir (harinosas).
1 huevo pequeño.
300 o 350 g de harina.
Sal.
Nuez moscada. INGREDIENTES SALSA:
1 cebolla.
1 bote de tomate frito casero.
300 g de carne de butifarra o salchichas.
Aceite.
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PREPARACIÓN DE LA SALSA
Cortar la cebolla en trocitos pequeños y sofreír en una sartén con aceite.
Agregar el tomate frito y la butifarra o salchichas sin la piel que las recubre.
Sofreír todo junto hasta que la carne haya quedado bien hecha e integrada a la salsa.
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PREPARACIÓN DE LOS ÑOQUIS
Lavar las patatas y ponerlas a hervir enteras en una olla con sal, procurando que sean de un tamaño similar.
Una vez cocidas dejar que se enfríen un poco, pelar y pasar por el pasapurés (no batidora)
Poner en un bol y agregar el huevo, la sal y la nuez moscada y mezclar bien.
Añadir una parte de la harina y seguir mezclando.
Pasar la mezcla a una superficie de trabajo enharinada e ir añadiendo la harina hasta que no se nos pegue en las manos. Ha de quedar blanda y flexible pero no pegajosa.
Con la mesa enharinada, cortar la masa en trozos y hacer rulos de un grosor de algo más que un dedo.
Cortar en trocitos de unos dos centímetros y hacer una incisión en el medio con un cuchillo para darle forma.
Poner agua con sal en una cazuela y hervir los ñoquis por tandas para que no se nos peguen unos con otros.
Cuando los ñoquis floten ya estarán a punto (se cuecen en unos dos minutos) se retiran de la cazuela con una espumadera y los pasamos a un fuente untada en un poco de aceite.
Agregar la salsa bien caliente y servir de inmediato.
CONSEJOS
La cantidad de harina no es exacta, dependerá de la calidad de patatas.
A falta de butifarra o salchichas podéis poner carne picada, pero en ese caso la tendréis que salpimentar.
Si os gustan con queso, le va muy bien el queso pecorino.