Sí, seguro que alguno ya la ha visto publicada en Ahora Zona Media. Para los que no lo sepáis, soy colaborador semanal de esta página de noticias sobre la zona media de Navarra. Cada viernes se publica una receta del blog, excepto los primeros viernes de mes, que será una receta en exclusiva que la publicaré más adelante en el blog.
Esta tarta de queso fue el pistoletazo de salida. Fue mi primera receta exclusiva por ser la primera, a la que le siguió la pizza el viernes pasado, al ser primer viernes de mes. ¡Qué casualidad! ¡Me han tocado dos viernes seguidos! Pero bueno, es el comienzo, no me importa. Quiero agradecer a Marta la confianza que ha depositado en mí como colaborador de su página, ¡es un gustazo!
Seguro que ya os lo había dicho alguna vez: las cheesecakes son uno de mis postres favoritos. Son el típico postre que no puedo evitar pedir cuando voy a un restaurante. Una buena tarta de queso puede poner el broche a una gran comida. Pero también al revés. Puede ser una cagada. ¡Ainnns! Me ha pasado más de una vez el acabar una buena comida con una tarta de queso (por llamarla de alguna manera) que lo ha fastidiado todo. ¡Y mira que es fácil hacerla!
Me encanta con ese toque de chocolate, más dulce que el de tres o frambuesa. Seguro que alguno se le ha podido desencajar la cara al verlo o leerlo, pero seguro que en el momento en el que la pruebe le encantará. Seguro.
Las hay de mil tipos diferentes y cada vez se ven más en los blogs. Yo tengo que ponerme un día a probar, experimentar y preparar nuevas tartas de queso con las que sorprenderos. Todo llegará. Lo prometo. Hasta entonces, os dejo esta receta inspirada en la típica de EEUU, de la ciudad de Nueva York.
NY Cheesecake con sirope de chocolate
Dificultad: Fácil
Tiempo horneado: 40 mins. (aprox)
Raciones: 12-14 (molde de 25 cm)
Etiqueta: Postre
Receta: La receta de la felicidad
Para la base:
Un paquete de galletas digestive de chocolate
90 gr de mantequilla
Para la tarta:
900 gr de queso crema (tipo Philadelphia)
Tres huevos
250 gr de azúcar blanquilla
200 ml de yogur griego
Una cucharadita de extracto de vainilla
Tres cucharadas de harina de repostería
Zumo de medio limón
Sirope de chocolate
- Precalentamos el horno a 200 ºC.
- Empezamos con la base. Trituramos las galletas metiéndolas dentro de una bolsa y golpeándolas con un rodillo, hasta obtener un polvo de galleta fino.
- Derretimos la mantequilla y mezclamos con la galleta en polvo. Cubrimos la base de un molde desmontable de 20 a 24 cm con papel de hornear, distribuimos encima la masa de galleta, presionando bien.
- Metemos el molde en el congelador y mientras preparamos el relleno.
- Batimos el queso crema con unas varillas y añadimos el azúcar, el yogur griego, la vainilla, el limón y la harina, hasta obtener una pasta homogénea.
- Añadimos los huevos de uno en uno. Es importante que no batamos mucho o la masa cogerá mucho aire y en el horno se desinflará y acabará quebrándose.
- Ponemos la mezcla de queso sobre la base de galletas que tenemos en el congelador.
- Introducimos la tarta en el horno y horneamos 10 minutos a 200 º C.
- Pasado ese tiempo, bajamos la temperatura a 90 º C y horneamos durante 30 minuto. El interior de la tarta, al moverlo, parecerá un flan.
- Una vez pasado este tiempo, dejamos la tarta de queso en el horno apagado varias horas. Yo suelo hacerla el día anterior y la dejo en el horno toda la noche.
- Una vez a temperatura ambiente la tarta, la llevamos al frigorífico hasta que esté totalmente fría.
- Lo mejor es preparar la tarta el día anterior al que se va a servir, para que esté en el horno toda la noche y las horas suficientes en el frigorífico.
- Servimos en frío y con sirope de chocolate por encima.
¡A disfrutar!
- Podemos triturar las galletas en un molinillo para el café, pero es más rápido con el rodillo.