Ya tocaba preparar un pan ;) y me he decidido por uno riquísimo, con copos de avena integral, cuya receta encontré aquí espero que os guste y os animéis a hacerlo.
Con estas cantidades sale un pan muy grande ó dos medianos. Yo he hecho uno, utilizando un molde ancho y rectangular para conseguir rebanadas alargadas.
Ingredientes:
110 grs. de copos de avena integrales
300 grs. de agua mineral
500 grs de harina de trigo de fuerza
100 grs de agua templada
100 grs de leche templada
13 grs de azúcar morena
30 grs de azúcar blanco
6 grs de sal
40 grs de levadura fresca
25 grs de copos extra para decorar
Instrucciones:
Lo primero que tenemos que hacer es hidratar los copos de avena de la siguiente manera: En un cazo mezclamos los copos con el agua mineral, llevamos a fuego mínimo durante 3 minutos, removemos, retiramos y dejamos enfriar.
Seguidamente ponemos en un bol la leche templada, el azúcar blanco y la levadura, disolvemos bien y dejamos reposar hasta que espume.
Como la mezcla de avena ya estará fría, le añadiremos el agua templada, el azúcar moreno y la levadura ya espumada. Mezclamos perfectamente.
Ponemos la harina en un bol mezclada con la sal.
Hacemos un hueco en el centro y le vertemos toda la preparación anterior.
Mezclamos bien, enharinamos la mesa de trabajo y depositamos la masa que es bastante pegajosa.
Iremos añadiendo harina y amasando hasta obtener una masa tierna que no se pegue a la mesa ni a las manos. Yo he necesitado casi 2oo grs. más de harina.
Hacemos una bola que dejaremos reposar tapada hasta que doble su volumen.
Desgasificamos, formamos el pan ó los panes, y los introduciremos en los moldes elegidos.
Pulverizamos con agua y espolvoreamos semillas de avena. Volvemos a dejar reposar hasta que doble su volumen.
Precalentamos el horno a 180 grados y horneamos durante unos 45 minutos.
Dejamos enfriar sobre rejilla.
Yo he utilizado panificadora para amasar:
He puesto la preparación de levadura con la mezcla de avena en el fondo de la cubeta. Encima la harina con la sal. He conectado el programa de amasados y levados. Mientras amasaba le he ido añadiendo harina hasta que la masa estaba perfecta, he dejado terminar el programa.
Desgasificamos la masa, formamos los panes y el resto igual.
Cuando enfrie se corta en rebanadas y podemos congelar, tendremos pan para los desayunos de varios días.
Fuente: este post proviene de Floruca, donde puedes consultar el contenido original.
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