Desde hace un tiempo tenía en mente hacer un pan con fermentación en frío pero me daba un poco de miedo, por fin me he atrevido y tengo que decir que el resultado me ha encantado. Ha quedado muy tierno, húmedo y tremendamente sabroso. Además se mantiene, casi como recién hecho, dos o tres días. Para conservar su frescura, y evitar que se reseque, debemos cubrirlo con film transparente o guardarlo en una bolsa de plástico bien cerrada.
Este pan casero es perfecto para los desayunos y meriendas de toda la familia. Si tienes niños en casa, o personas mayores con problemas para masticar, resulta muy apropiado para hacer sus bocadillos, su delicada textura permite comerlo con mucha facilidad. Admite multitud de combinaciones, tanto dulces como saladas, y puedes tostarlo también si te apetece. Cualquier cosa le va bien; queso, jamón cocido, crema de chocolate, mermelada…
Elaborar panes caseros es muy gratificante, si te gusta el mundo de las masas te recomiendo el pan de plátano y el pan tierno y esponjoso con masa de donuts.
Estarás de acuerdo conmigo que saborear una rebanada de pan de leche casero no tiene precio, un placer que está al alcance de todo aquel que lo desee. ¿Quieres hacer tu propio pan de leche hoy mismo? Entonces no pierdas detalle y sigue la receta, es muy sencilla.
PAN DE LECHE CON PASAS Y ARÁNDANOS
INGREDIENTES:300ml de leche
500g de harina de fuerza
50g de mantequilla
25g de levadura fresca de panadería
75g de azúcar
3g de sal
50g de uvas pasas
50g de arándanos deshidratados
1 huevo (para pintar)
PREPARACIÓN:
Fundir la mantequilla.
Templar la leche y disolver la levadura en ella.
En el bol de la amasadora mezclar la harina con la sal.
Añadir la mantequilla fundida y fría, el azúcar y la leche con la levadura disuelta.
Amasar hasta conseguir una masa homogénea y suave (25 minutos haciendo dos reposos durante el amasado de 5′ cada uno).
Formar una bola y depositarla en un recipiente engrasado. Tapar con film transparente y guardar en el frigorífico 8/10 horas.
Sacar la masa de la nevera y dejarla 1 hora a temperatura ambiente.
Desgasificar, estirar la masa con ayuda de un rodillo y repartir las frutas por toda la superficie. Enrollar y amasar para integrarlas bien.
Formar el pan al gusto y esperar a que triplique su tamaño en un molde apto para el calor forrado con papel vegetal.
Precalentar el horno a 180º, pintar el pan con huevo batido y hornear 15/20′ (el tiempo de horneado depende de cada aparato).
Retirar cuando esté dorado, desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla.
Me apasiona ejercer de panadera, es una tarea muy satisfactoria para mi a pesar de ser bastante impaciente, cualidad nada compatible con el arte de hacer pan. Para obtener un pan como es debido el tiempo juega un papel muy importante, apresurarse no es conveniente para este tipo de preparaciones, por lo tanto hay que armarse de paciencia y saber esperar. Si tenemos prisa podemos echar mano de panes rápidos sin fermentación, pero si lo que queremos es un pan tierno y esponjoso debemos respetar los tiempos de levado si o si. La elaboración de un pan dulce como el de hoy requiere calma, si no dispones del tiempo necesario es preferible que lo pospongas para otro día.
Permíteme un consejo, haz la masa el día anterior y déjala fermentando en la nevera toda la noche, de este modo el tiempo de espera es menos pesado.
Yo dividí la masa en dos partes e hice un pan de leche alargado y otro redondo. Puedes hacer un pan grande solamente o formar bollitos pequeños si lo deseas, sea cual sea el formato estará exquisito.
Tal vez te apetezca también este pan brioche de yogur griego, es imposible decir con palabras lo bueno que está, tendrás que probarlo. Anímate, no te arrepentirás.
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