Sentimos cierta debilidad por ir a buscar moras. Lo sabéis de sobra. A lo tonto a lo tonto hemos hecho cinco recetas en las que las moras tienen un papel protagonista: bizcocho con moras silvestres, muffins de moras, mermelada de mora, coulis de moras y panna cotta de coulis de moras. Este año el tema de ir a coger moras al campo ha entrañado algunos problemillas. Había pocas, eran pequeñas por la falta de lluvia y los lugares habituales donde crecen las zarzamoras estaban trillados por los muchos buscadores de este fruto tan barato, que está al alcance de la mano de cualquier mortal que no tema a los arañazos. Sea como sea, no podíamos faltar a nuestra cita anual con una receta de este fruto y por esta razón hoy os proponemos una panna cotta a la vainilla con coulis de moras.
RECETA
.
INGREDIENTES (para 4 personas)
500 ml de nata (crema de leche) para montar.
70 g de azúcar glas.
4 hojas de gelatina.
1 vaina de vainilla.
Coulis de moras.
.
PREPARACIÓN
Poner a remojo en agua fría las hojas de gelatina.
Poner la vaina de vainilla sobre una tabla de cortar. Con la punta de un cuchillo hacer un corte transversal de forma que llegue al centro de la vaina pero que no traspase el lado contrario. Abrirla con los dedos, volver a apoyarla en la tabla y pasar el cuchillo por toda la vaina para sacar las semillas de dentro.
Poner a hervir la nata (crema de leche) con el azúcar y las semillas de la vainilla. Cuando rompa a hervir retirar del fuego, tapar y dejar infusionar durante diez minutos.
Colar con un colador fino y añadir las hojas de gelatina bien escurridas. Remover hasta comprobar que la gelatina esté bien disuelta.
Echar en los moldes correspondientes, dejar enfriar y meter en la nevera.
Se puede acompañar de la salsa que más guste. En nuestro caso con el coulis de mora.
.
CONSEJOS
Para desmoldar la panna cotta hay que introducir el molde en un recipiente con agua caliente para que el calor funda ligeramente la capa que está en contacto con el molde. Es importante no dejarlo en el agua más que unos segundos para que no se deshaga la gelatina y el postre se eche a perder. Si la primera vez no se desmolda, repetir unos segundos más.
Pueden realizarse bonitos diseños con el coulis (o con cualquier otra salsa) utilizando una cuchara pluma.