Hace ya algunos años, cuando en la tele anunciaban la emisión de algún programa que finalmente no podían emitir nos decían aquello de: “por causas ajenas a nuestra voluntad…”, o bien “debido a un fallo técnico…” y nos quedábamos con las ganas de ver lo que ya no emitían. Pues ya veis, eso mismo nos ha pasado a nosotras que por causas ajenas a nuestra voluntad y debido a un fallo técnico hemos estado ausentes durante varias semanas. Hasta hoy.
Una vez solucionados los problemas de informática que surgieron y que han traído a Patricia de cabeza (menos mal que está ella para resolver estos casos), por fin podemos ponernos manos a la obra.
Hoy os traigo unos pasteles muy conocidos. Son mentirosillos porque se llaman pasteles de arroz y sin embargo en sus ingredientes no hay arroz. ¿Por qué se llaman así?. No tengo ni idea pero cuando mi amiga Maite me dio la receta, hace ya algunos años, para mi sorpresa los llamó pasteles de arroz. Con el tiempo, he visto que mucha gente los hace y también se les conoce como pasteles vascos o de Bilbao. La verdad, no sé si será ese su origen o si también nos estarán engañando en esto.
Son muy pero que muy sencillos de hacer. De las recetas más fáciles que existen y sin embargo nunca conocía a nadie que habiéndolos probado no diga que les encantan. Suelo hacerlos cuando tengo poco tiempo para cocinar.
Dicho esto, no tenéis excusa posible para dejar de hacerlos
Ingredientes:
250 grs. de nata (crema de leche) de montar
1/4 litro de leche
80 grs. de mantequilla
2 huevos
3 cucharadas de harina
5 cucharadas de azúcar
1 pizca de sal
1/2 cucharadita de canela.
1 paquete de masa de empanadillas (tamaño pequeño)
Elaboración:
Como siempre, empezamos preparando todos los ingredientes ya medidos y los utensilios que vayamos a necesitar. La mantequilla y los huevos es aconsejable que se encuentren a temperatura ambiente porque así se integrarán mejor.
Las cantidades que os he indicado son las que da la receta original. Como se puede ver en las fotos yo las he duplicado porque necesitaba mayor número de pasteles pero nada más.
Cubrimos con la masa de empanadillas moldes de magdalenas y los colocamos en la bandeja del horno.
Mezclamos con la batidora todos los ingredientes y rellenamos con el batido los moldes. Ponerlo en una jarra nos facilita bastante la labor.
Metemos en el horno precalentado, en la función “arriba y abajo” a unos 200ºC y estarán hechos en unos treinta minutos.
Si vais a utilizar moldes de papel os recomiendo utilizar más de uno y que queden juntos en la bandeja del horno porque con el peso del batido se abre y cae toda la mezcla. Yo utilizo moldes de silicona, mucho más consistentes que evitan que esto suceda, los compré porque los hago con frecuencia.
Los paquetes de empanadillas traen 16 unidades pero con esta cantidad salen unos 20 pasteles (algunos pueden hacerse sin el hojaldres pero NO quedan igual). No pongáis más de tres cuartos de la capacidad del molde porque al calentar la masa sube y se desparrama. Al detener la cocción, la masa vuelve a bajar.
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