Hoy empezamos la mañana con dulce, así que vamos a empezar la semana de la manera más dulce.
¿La comienzas conmigo? Vamos a por una receta buenísima a la par que tradicional.
A por ella.
Feliz día.
Ingredientes.-
Para el relleno
Dos boniatos grandes (una vez asados pesan 453 gr)
200 gr de azúcar
Dos cucharadas de canela
Para los pastelillos
Un vaso de aceite de girasol
Medio vaso de azúcar
150 gr de margarina
Un poco menos de medio vaso de anís
2 huevos grandes
700 gr de harina
Preparación.-
Lo primero de todo, limpia los boniatos y lávalos bajo el chorro de agua fría.
Pon a calentar el horno a 180º y mete los boniatos durante 45 minutos.
Cuando estén hechos, pélalos y machácalos muy bien con un tenedor.
Añade al puré el azúcar y la canela y remueve muy bien para que todo quede bien integrado.
Si aún quedaran grumos pásalo todo por la batidora y cuando lo tengas, tápalo con papel film y reserva.
Ahora vamos a hacer la masa de los pastelillos.
Mezcla en un cazo la mantequilla con el aceite y el azúcar.
Calentamos, llegando al punto que la mantequilla esté derretida pero que no esté muy caliente, mezclamos bien hasta conseguir que los tres ingredientes estén completamente integrados.
Añadimos ahora el anís y a continuación poco a poco el harina, no lo pongas de una que saldrán grumos, ve poniendo un poco, bate hasta que quede integrado, otro poco y así hasta completar.
Separa la clara de uno de los huevos y reserva.
Añade la yema y el otro huevo entero a la masa y bate bien hasta que todo forme una masa homogénea.
Ya tenemos la masa preparada, déjala reposar durante 30 minutos y cuando haya pasado el tiempo vamos a moldearla.
Coge un poquito de masa y dale forma de pelotita, ahora ve aplanándola poco a poco hasta que esté finita y tenga una forma redondeada y plana.
Pon una cucharada del relleno de boniato y cierra la "empanadilla".
Haz todas los pastelillos y ponlos encima de una placa de horno.
Bate muy bien la clara que había sobrado de antes y pinta los pastelillos.
Añade un poco de azúcar y canela por encima.
Precalienta el horno a 150º y mete los pastelillos.
Cuece durante 30 minutos.
Sácalos y ponlos en una fuente.
Servir y comer tanto frío como caliente.
A disfrutar.