Después de una semana horriblemente ocupada por fin he tenido un huequito para preparar algo dulce. Estos pastelitos de mermelada de cereza no son especialmente vistosos pero tenía ganas de hacerlos y no son nada complicados.
Son unos “bocaditos” dulces que he preparado para acompañar a la tarta de cumpleaños de mi primo y que hemos celebrado en familia este sábado pasado.
Ahora, después de haberlos preparado se me ocurren varias formas de que me hubiese quedado mejor, pero todo es únicamente por motivos estéticos. Por ejemplo, se podría haber puesto un poquito de colorante rojo para que la glasa quedase de un rojorosa más intenso que el que le da el licor de cereza. Por otro lado, la glasa habría quedado mucho más fina y suave si se hubiese utilizado azúcar glas comprada y no “fabricada” en casa a partir de azúcar granulado. (Aunque quedan muy buenos, la superficie final habría quedado mucho más lisita y bonita).
Ingredientes:
Para el bizcocho
3 yemas+3 claras (tamaño L)
100 gr mantequilla
1 bolsita de azúcar vainillado (8gr)
120 gr de azúcar (60 gr + 60 gr)
1 pizca de sal
60 ml de leche
Ralladura de un limón
90 gr harina
30 gr maicena
½ cucharada de levadura químicaPara el relleno
200 gr de mermelada de cerezaPara la glasa
200 gr azúcar glas
2 cucharadas de licor de cerezas (kirsh o similar)
2 cucharadas de aguaElaboración del bizcocho:
Ponemos el horno a precalentar a 180ºC y forramos una bandeja de horno con papel vegetal.
Separamos en dos recipientes las yemas y las claras.
En el recipiente de las yemas añadimos la mantequilla a punto pomada (si es necesario la ponemos 10 segundos en el microondas), el azúcar vainillado, la mitad del azúcar (60gr), la sal, la leche y la ralladura de limón. Batimos bien hasta obtener una mezcla homogénea y espumosa.
Luego incorporamos la harina, la maicena y la levadura, previamente tamizada. Yo he pesado los ingredientes secos en un pequeño bol y los voy tamizando a medida que los voy incorporando. Reservamos esta mezcla.
Por otro lado, en el recipiente con las claras, las batimos a punto de nieve y hacemos un merengue duro utilizando la otra mitad del azúcar (60 gr).
Añadimos el merengue a la mezcla de las yemas en dos o tres veces. Mezclamos con ayuda de una espátula de silicona utilizando movimientos envolventes y de abajo hacia arriba.
Vertemos la mezcla directamente sobre la bandeja y con una espátula la extendemos con cuidado. No es necesario preocuparse porque la superficie quede perfecta ya que durante el horneado va quedando homogéneo y lisito.
Horneamos 10-12 minutos a 180ºC. Tenemos que estar pendientes ya que es una superficie de bizcocho muy finita y se hace enseguida. Colocar la bandeja en una posición media-baja.
Colocamos la plancha de bizcocho sobre una rejilla y dejamos enfriar.
Montaje de los pastelitos:
Cortamos la plancha de bizcocho por la mitad. Untamos generosamente una de las capas con la mermelada de cerezas y la cubrimos con la otra mitad.
Elaboramos la glasa mezclando el azúcar glas con el licor de cerezas y agua hasta obtener la textura deseada. Cubrimos los bizcochos con la glasa y troceamos el pastel en rectángulos o cuadrados de unos 5cm de lado o 5x8cm.