Unas Patatas al horno con ajo y tomillo que lo mismo te sirven para preparar un delicioso picoteo que la guarnición perfecta a carnes y pescados. Se cocinan con piel así que asegúrate de lavarlas bien. A la hora de cocinarlas, a mí me encanta que queden doraditas y, aunque ya sabes que siempre digo que el tiempo de horneado es orientativo porque no todos los hornos calientan igual, las tendrás que tener en el horno como 45 minutos. Aprovecha pues para hacer un rico asado también.
Ingredientes
4 o 5 patatas del mismo tamaño aprox.
Aceite de oliva
Sal
Ajo en polvo
Tomillo
Patatas al horno con ajo y tomillo: preparación de la receta
1. Lava bien las patatas bajo el grifo porque las vas a cocinar con piel. Corta cada una de ellas en rodajas gruesas y haz cortes en una dirección y luego en la contraria formando una rejilla sin llegar a traspasarla. Es importante que las patatas queden más o menos del mismo tamaño para que al hornearse se hagan a la vez.2. Colócalas sobre una bandeja con papel de horno y riega con un chorrito de aceite y una pizca de sal al gusto.
3. Cocina las patatas con ajo y tomillo. Hornea a 220º C - 428º F con calor arriba y abajo durante 40 minutos aproximadamente. Tienen que quedar cocinadas y doradas.
4. Una vez las saques, y mientras están calientes, espolvorea ajo en polvo, tomillo y un chorrito de aceite de oliva antes de servir.
Mis consejos para preparar Patatas al horno con ajo y tomillo:
El ajo y tomillo va a tu gusto, ponle más o menos según lo especiadas que te gusten.
Puedes servirlas como aperitivo o como guarnición acompañando a carnes y pescados. Ya que enciendes el horno, puedes aprovechar para hacer cualquier asado.
Si te gustan las patatas, echa un vistazo a estas Patatas gajo en airfryer perfectas también como picoteo o guarnición. Ya sabes que las freidoras de aire, además de ser muy limpias cocinan sin aceite y quedan muy ricas.
Te dejo unas recetas de carne para que acompañes estas Patatas al horno con ajo y tomillo. Si te gusta el pollo, no te pierdas estas Pechugas villaroy que quedan muy jugosas por dentro y crujientes por fuera gracias al rebozado.