En estas fechas ya me empleo en preparar cosas que puedan servirme para los menús de Navidad.
Son ensayos para ver si dan resultado las recetas que voy recopilando. Algunas saladas, pero la verdad es que me tiran más los dulces.
Intento buscar platos que puedan ser preparados con antelación, esos dias no apetece estar metida en la cocina, al menos no todo el día.
Y aunque ya he preparado mas de un postre válido para los menús de las fiestas lo que no pueden faltar son los dulces tradicionales.
Este es uno de ellos. Pestiños, que hay quién dice que son más típicos de Semana Santa, pero en Málaga empiezan a aparecer en noviembre y duran en las tiendas hasta Navidad.
En cualquier caso, sea de Navidad o de Semana Santa es un dulce muy tradicional que no podéis dejar de probar.
Existen dos variantes, los rebozados en azúcar y los bañados en miel. En mi casa gustan más los de azúcar, pero he hecho unos poquitos en miel para que los veáis también.
INGREDIENTES:
200 gr de aceite de oliva
Un trozo de piel de naranja sin nada de blanco
1 cucharadita de matalauva o anís en grano
1 cucharadita de ajonjolí o sésamo
50 gr de zumo de naranja
70 gr de azúcar
30 gr de anís dulce
30 gr de vino dulce de Málaga
450 gr de harina de trigo
100 gr de harina de fuerza
1 pellizco de sal
Aceite de girasol o de oliva suave para freir
azúcar para rebozar
almíbar de miel para bañar (100 gr de miel +25 gr de agua)
PREPARACIÓN:
CON THERMOMIX:
Comenzamos calentando el aceite 3 minutos a temperatura varoma y velocidad 1.
Añadimos la piel de naranja, la matalauva y el ajonjolí y volvemos a calentar 3 minutos, varoma y velocidad 1. Al acabar sacamos la piel de la naranja y la desechamos.
Agregamos el zumo de naranja, el azúcar, el anís y el vino. Mezclamos 5 segundos a velocidad 4.
Por último incorporamos las harinas y la sal y mezclamos primero 15 segundos a velocidad 6 y amasamos después 2 minutos a velocidad espiga.
Sacamos la masa que estará como desmigada y la hacemos una bola. Aceitamos el rodillo para que no nos cueste trabajo y estiramos hasta dejarla finita.
Cortamos cuadrados de masa, yo lo he hecho con un cortapasta cuadrado que tengo, pero si no tenéis cortáis con un cuchillo.
Ahora llevamos hasta el centro los picos opuestos del cuadrado, mojando con agua para que se peguen.
Cuando hayamos hecho toda la masa, freímos los pestiños en aceite caliente hasta que estén dorados. Yo lo he hecho en freidora. Ya fríos y en caliente los rebozamos en azúcar.
O los bañamos en el almíbar de miel (que esté frío) que es simplemente mezclar miel y agua y calentar hasta que se integren.
SIN THERMOMIX:
En un cazo calentamos el aceite y cuando esté caliente añadimos la matalauva, el ajonjolí y la cáscara de naranja. Cuando la cascara de naranja empiece a arrugarse, apartamos del fuego el cazo y desechamos la piel de la naranja.
Dejamos que el aceite se temple un poco y añadimos el azúcar, el zumo de naranja, el vino y el anís. Mezclamos para que se integre todo.
En un recipiente amplio ponemos las harinas y la sal y agregamos los líquidos templados. Comenzamos a mezclar con una cuchara de madera y seguimos amasando con las manos hasta tener una masa pegajosa pero fácil de manejar.
A partir de aqui podemos seguir como os indico más arriba.
Calentamos el aceite
Añadimos la piel de naranja, la matalauva y el ajonjolí y volvemos a calentar
Agregamos el zumo de naranja, el azúcar, el anís y el vino.
Por último incorporamos la harina y la sal y mezclamos primero y amasamos después.
Sacamos la masa que estará como desmigada y la hacemos una bola.
Estiramos hasta dejarla finita.
Cortamos cuadrados de masa
Ahora llevamos hasta el centro los picos opuestos del cuadrado, mojando con agua para que se peguen.
Hacemos toda la masa y los dejamos preparados para freir.
Freímos los pestiños en aceite caliente hasta que estén dorados
En caliente rebozamos en azúcar.
O bañamos en el almíbar de miel.
Y listos para degustar. Guardados en una lata que cierre bien duran varios días.
Riquísimos os lo aseguro.