Hoy una receta tan fácil como sana y sencilla, Puerros gratinados con bechamel.
Si te gusta la verdura te gustarán y si no te gusta mucho… prueba, casi seguro que te convencerán. La mezcla de sabores resulta suave y agradable a la vista y al paladar.
No es una receta cara, el jamón que es el único ingrediente que podría disparar un poco el presupuesto, se usa en una pequeña cantidad, incluso lo puedes sustituir por jamón cocido o fiambre de pavo, a tu gusto. Yo prefiero el saborcillo que deja el jamón serrano en el gratinado.
Así es como yo suelo hacer los puerros gratinados con bechamel, pero cada cual puede hacer las variaciones que se le ocurran, es lo bueno de la cocina, no hay normas exactas.
Estos son mis ingredientes:
4 puerros
8 lonchas de jamón serrano
8 lonchas de queso (he usado queso de cabra suave)
2 cucharadas de harina
2 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de aceite
1/2 litro de leche
Sal, pimienta, nuez moscada (opcional)
80 g. de queso rallado al gusto
ELABORACIÓN:
Empezamos por limpiar los puerros con agua fría asegurándonos de que no queda tierra entre sus hojas. Cortamos en dos trozos de unos 10 ó 12 cm la parte blanca, y quitamos las raíces y las hojas exteriores que puedan estar más estropeadas. La parte verde la podemos usar para sopas, caldos cremas etc. no la tiréis.
En una olla con agua y sal ponemos los 8 trozos de puerro al fuego hasta que estén blanditos, aproximadamente estarán en 20-25 minutos. Los escurrimos y dejamos templar.
Vamos a hacer una bechamel ligera poniendo en un cazo a fuego medio las dos cucharadas de mantequilla y las dos de aceite, doramos en esta grasa la harina durante un minuto y echamos la leche, sazonamos y dejamos cocer hasta que espese ligeramente y tengamos una crema. Reservamos.
Mientras, encendemos el horno a 200º gratinador.
En un plato vamos haciendo los rollitos de puerro; ponemos una loncha de queso, encima una de jamón, después un trozo de puerro y enrollamos. Cuando tengamos los 8 rollitos hechos, los pasamos a una fuente apta para horno en la que habremos cubierto ligeramente el fondo con una parte de la bechamel.
Una vez colocados los rollitos de puerro, jamón y queso cubrimos con el resto de la bechamel, el queso rallado y gratinamos hasta que tomen color, dependiendo del horno unos 15 minutos.
Ya estarán listos para comer nuestros puerros gratinados con bechamel, ¡a disfrutar!
Hay una variación que se puede hacer facilmente. En vez de hacer una bechamel podemos hacer una veloute con el caldo de cocer los puerros. Se hace de la misma forma que la bechamel sustituyendo leche por agua-caldo, quedará menos cremosa pero rica también.