La receta original de 1605, únicamente llevaba la masa quebrada, y la mezcla de la nata (crema de leche) con los huevos aromatizada con sal, pimienta y nuez moscada. Con posterioridad en el siglo XIX se le añadió la panceta magra fresca o ahumada. El queso rallado tampoco estaba en la receta primigenia.
Es una receta muy versátil puesto que se pueden añadir otros alimentos en la elaboración de su relleno por lo que sus preparaciones pueden ser casi infinitas.
INGREDIENTES:- 4 puerros solo la parte blanca (yo he utilizado puerros al natural en conserva)
- 1 rulo de queso de cabra
- 200 ml de nata (crema de leche) para cocinar
- 3 huevos grandes
- una pizca de sal
- pimienta negra molida
- 1 cucharada de AOVE
- queso rallado
- masa quebrada integral de espelta
La masa quebrada de espelta ya la tienes en el blog. Pincha sobre el ingrediente y llegarás a la receta. Si no quieres utilizar esta masa puedes utilizar otra que te guste más o comprarla ya preparada.
Con la cantidad de masa quebrada que te saldrá puedes forrar un molde grande de tartaleta o 7 tartaletas pequeñas (fueron las que yo hice)
PREPARACIÓN:
1. Corta los puerro en pedacitos muy pequeñitos y salpimenta a tu gusto. Échalos en una sartén con una cucharada de AOVE y saltéalos hasta que queden blanditos y de un color casi transparente.
2. En un cuenco mezcla la nata (crema de leche) para cocinar con los huevos y bátelos bien hasta que todo quede bien integrado.
3. Una vez salteados los puerros échalos sobre un colador para que escurran bien el aceite. A continuación añádelos a la mezcla de la nata (crema de leche) y los huevos.
4. Corta el rulo de queso en trocitos pequeños, e incorpóralos a la crema.
5. Precalienta el horno a 170 grados.
6. Mientras se calienta el horno forra los moldes con la masa quebrada y pínchala con un tenedor para evitar que suba.
7. A continuación hornea las bases de las tartaletas 10 minutos a 180 grados.
8. Transcurrido este tiempo saca las tartaletas del horno y añádeles la crema.
9. Vuelve a meterlas en el horno durante 10 minutos a 180 grados.
10. Cuando haya transcurrido este tiempo, abre el horno (con mucho cuidado), echa sobre las tartaletas el queso rallado y vuelve a hornearlas otros 10 minutos a la misma temperatura.
11. Finalizado este último horneado, apaga el horno y deja dentro las tartaletas otros 10 minutos.
Ya solo queda desmoldar, servir y disfrutar de estas riquísimas tartaletas.
A mi me gustan mucho este tipo de tartas saladas, suelo prepararlas a menudo en casa, porque son fáciles de cocinar y una vez hechas aguantan varios días, si las conservas bien refrigeradas, y son ideales tanto para saborearlas durante el almuerzo como en la cena. Yo las suelo poner como plato único acompañada de un buena ensalada.
La receta original es de María del Carmen González para el blog COCINA Y RECETAS DE HOLA pero la suya además incluía entre los ingredientes jamón cocido. En el enlace tienes su receta.
Espero que hagas estas recetas y si tienes cualquier duda puedes preguntarme lo que sea a través del formulario de contacto del blog o en mis redes sociales. Te contestaré lo antes posible.
¡Nos vemos pronto!
Blanca
Fuente: este post proviene de Tu ves y yo hago, donde puedes consultar el contenido original.
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