Que fáciles son las quichés y que ricas que están.
Esta es la primera quiché que yo aprendí a hacer y la receta es de uno de los libros que tengo en mi estantería, de hace un montón de años. El punto se lo dan los cominos, la hace realmente muy sabrosa.
Las quichés son muy fáciles de elaborar, no sé por qué mucha gente les tiene miedo e imponen ese respeto. En estos días en los que encuentras la masa quebrada ya hecha en todos los supermercados, no necesitas ni tan siquiera, tener un rodillo. Que creo que es lo que más miedo le dá a la gente, el manejo del rodillo.
Las dos cosas que yo destacaría para convertirse en la reina de las quichés son solamente dos:
Tener un buen molde para tartas o quichés
Conocer bién a tu horno.
Tener un buen molde es fundamental, la masa tiene que cocerse bién, por igual, y cocerse bién. Estoy encantada con este molde que ves en la foto. Es de cerámica y es de Le Creuset.
Aparte de que es precioso, es que cuece la masa de maravilla.
El otro punto imprescindible es conocer bien a tu horno. En el tema de quichés yo le tengo cogido el punto, 200º durante 25 minutos con calor solo en la parte de abajo y 5 minutos con el grill a tope.
Si le pongo las dos placas, calor arriba y abajo, se me achicharran las quichés. Y en definitiva, no es una masa que necesite calor para subir (como la de un bizcocho), así que enciendo solo la placa de abajo y así no se te queman por encima.
En cuanto a la masa quebrada, no hay punto de comparación entre la hecha en casa y la comprada en un súper. Siempre la hago yo, y la receta es ésta aquí . La puedes hacer en la Thermomix o en cualquier procesador de alimentos. No es nada dificil, se hace en un momento con ingredientes que siempre tienes en casa y es mucho más económica que comprarla.
Ingredientes:
1 lamina de pasta quebrada
3 puerros grandes
1/2 cebolla
3 huevos
200 ml. de nata (crema de leche) para cocinar
100 gr. de bacon en tiritas
100 gr. de queso Emmental para gratinar
1/2 cucharadita de comino en polvo
Elaboración:
Engrasamos un molde para quiché y extendemos la lámina de pasta quebrada. Pinchamos ligeramente toda la superficie con un tenedor, para que no suba.
Cortamos la cebolla y la parte blanca de los puerros en juliana y lo ponemos a pochar durante 15 minutos en una cacerola con un poco de aceite de oliva y una cucharada de mantequilla. Le añadimos el bacon picado. Ponemos sal y pimienta y el comino molido.
Echamos los puerros en nuestra tartaleta de masa quebrada.
En un recipiente batimos los huevos, la nata (crema de leche) y la mitad del queso rallado. Salpimentamos.
Echamos la mezcla de huevos en la tartaleta y cubrimos con el resto del queso rallado.
Esparcimos por la superficie unos pegotitos pequeños de mantequilla.
Horneamos a 200º, calor solo abajo y horno precalentado, durante 25 minutos. Encendemos el grill al máximo y horneamos por 5 minutos más. ¡Cuidadín que no se queme!