Hoy os traigo una receta salada: saquitos (o raviolis) de calabacín. Son muy fáciles de hacer y, lo más importante, sanos. Para todos aquellos que estéis en plena operación bikini y se os pongan dientes largos al ver las recetas de postres… este va para vosotros. Únicamente necesitamos el ingrediente principal: el calabacín, y los necesarios para el relleno. Es una receta muy agradecida porque puede rellenarse de cualquier cosa, y es perfecta tanto para entrante, aperitivo o plato principal.
La elaboración es muy simple:
1.- Cortar el calabacín a lo largo, en firas tiras (con madolina o un cuchillo bien afilado).
2.- Salar al gusto y meter en el microondas a máxima potencia durante 1 minuto aproximadamente, para hacerlas más flexibles y no se rompan al doblar.
3.- Preparar el relleno al gusto: de gambas y setas, de carne picada, de verduras, de pollo y rulo de cabra, de jamón y queso…
4.- Colocar las tiras en forma de cruz de dos en dos y añadir el relleno en el centro. Cerrarlas puntas dejando la unión hacia abajo.
5.- Dorar los saquitos vuelta-vuelta en la sartén.
Así de sencillo y delicioso queda. ¡Que aproveche!
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