Cuando he releído el título es lo que me ha parecido.
Debería ser más terrorífico que asqueroso, pero no se me ocurre otra cosa ante esta calabaza vomitiva.
Se aceptan sugerencias jajaja…
Pues eso, que vamos a preparar un guacamole saliendo de una calabaza.
Esta receta lleva un poquito más de trabajo por lo de vaciar la calabaza.
El guacamole lo hacéis rápido, pero si no también está la opción de comprarlo. Nosotros el año pasado con las prisas acabamos poniéndolo comprado. El del Mercadona está bastante bien.
Yo os dejo aquí la receta para que lo hagáis si os apetece y da tiempo.
Vamos allá.
Ingredientes:
Una calabaza grande
• 2 aguacates maduros. Para ver si está bien, quitarle el taponcito que tiene en el culo, no tiene que estar ni muy verde ni muy marrón, y no tiene que tener puntitos, o no muchos al menos.
• 1 tomate
• 100 g de cebolla
• 1 Chile jalapeño (opcional) Yo uso que compré secos en bote en el Aldi.
• 20 g de cilantro fresco
• 1/2 lima
• Sal
Sal
Elaboración:
Primero tenemos que entretenernos preparando la calabaza.
Cortamos la parte superior y vamos vaciando con cuidado.
La pulpa la reservamos y podemos preparar una deliciosa crema de calabaza como ésta que os dejé por aquí. O unos ricos fusilli con calabaza.
Después de vaciarla tenemos que hacer los ojos y la boca.
Los podeis dibujar primero y luego ir cortando. O hacer unas plantillas primero en cartulina y luego con ellas marcar sobre la calabaza.
Una vez tenemos listo nuestro recipiente – bol – cuenco, vamos a preparar el guacamole.
Picamos la cebolla en trocitos bien pequeños.
Hacemos lo mismo con el chile jalapeño.
Lavamos, pelamos y picamos en daditos pequeños el tomate.
Lavamos el cilantro y separamos las hojas de los tallos. Sólo vamos a usar las hojas.
Las picamos finamente con un cuchillo afilado.
Cortamos la lima por la mitad y exprimimos el jugo de una mitad.
Cortamos los aguacates por la mitad y retiramos los huesos.
Para quitarlos damos un golpe seco con el cuchillo en el hueso, giramos un poco tirando hacia fuera y sale estupendamente.
Sacamos la carne con una cucharilla y la ponemos en un cuenco amplio y la chafamos con un tenedor.
Agregamos los ingredientes que teníamos preparados (la cebolla, el chile, el tomate, el cilantro y el zumo de la media lima) y mezclamos. Sazonamos al gusto.
Metemos parte del guacamole en la calabaza que habíamos preparado, asomando por la boca y poniendo el resto sobre un plato, fuente, debajo de la boca vomitiva de nuestra calabaza.
Servimos acompañado de unos nachos o unas crudites.
Listo y ¡a disfrutar!