A pesar de ser una receta que hago bastante, nunca la había puesto en el blog, pero creo que ha llegado el momento de tenerla aquí guardada porque a mi hija le encanta y la quiere hacer ella, así que os la dejo porque está deliciosa y además Paula la puede copiar cuando quiera y me la hace ella a mi
Primero ponemos a calentar tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra en una cazuela grande y le echamos una cebolla picada, rehogamos unos minutos hasta que se ponga blanda y antes de que se empiece a dorar, agregamos unos champiñones naturales cortados en láminas, (los que queráis y más os gusten, con chantarellas queda divino, yo este que veis lo he hecho con champis blancos y portobellos mezclados] y le seguimos dando vueltas hasta que se hagan y empiecen a dorarse, entonces salpimentamos y le agregamos un chorrito de vino blanco y lo dejamos un par de minutos que se evapore.
Ahora le ponemos el arroz para risotto (lo compro en Mercadona y es un grano redondo], yo pongo un par de puñados por persona y le damos varias vueltas hasta que se impregne todo el arroz con el refrito, momento en que le añadimos caldo de pollo y verduras, a poquitos. Yo para 3 personas, es decir 6 puñados de arroz, he usado un total de un litro de caldo, que puedes tener hecho de antemano o bien usar un brick, pero eso sí, en el risotto a diferencia de otros platos de arroz, debes añadir caldo de poco a poco, de forma que tengas la cantidad de líquido suficiente para que se vaya haciendo el grano, pero sin dejar de remover y que vaya soltando el almidón. Cuando se va quedando seco, volvemos a añadir otro vaso de caldo y así durante 20-22 minutos aproximadamente.
Apagamos, apartamos y le echamos queso parmesano recién rallado, como 200 gr, una cuña casi entera, removemos una última vez para que se derrita el queso y servimos inmediatamente, yo una vez emplato le pongo un poco de pimienta negra recién molida y unas escamas de pimentón picante La Chinata, que me encanta el toque que le da, aunque esto es totalmente opcional.
Hoy vestimos la mesa también con los manteles individuales de La Pajarita esta vez ambos son de papel, debajo uno que ya os enseñé de la gama parole y el que está encima es el tono rojo de la gama tesela y pongo el tono porque el mismo mantel lo podéis adquirir en distintos colores o gramajes, son ideales tanto para uso doméstico como para restauración, ya que son personalizables y ecológicos. Me encanta como combinan entre sí, acompañados además de la servilleta canguro