Hoy me gustaría haber podido compartir con vosotros, para darle la bienvenida a este regreso, una receta Extremeña muy especial, pero al haberme mudado a Sevilla me está costando encontrar el ingrediente principal, no se por qué. Ya os contaré... De todas formas espero que esta también os guste.
Os cuento primero un poquito.
Durante mi estancia en Londres viví con una familia judía de la que aprendí muchísimo y a la que le tengo muchísimo cariño. Con ellos aprendí a comer verduras; si a comer VERDURAS.
Antes de comenzar este blog, yo era de esas personas que comían fatal y poquito a poco me fui animandome a probar cosas nuevas, pero las verduras siempre habían sido mi asignatura pendiente.
Pues bien, los Walton tenía una norma muy importante: "hay que comer al menos una verdura con cada comida". Y así fue, con ellos probé casi de todo y ahora me encantan :). No sigo su norma, aunque me gustaría, pero si que las como a menudo.
Bien, pues aquí os dejo una de las recetas que solía comer con ellos y que me parece deliciosa, ¿qué os parece a vosotr@s?
INGREDIENTES:
80 gr arroz
1 diente de ajo
1/4 de cebolla pequeña
1 cubito de caldo de pollo
300 ml de agua
80 gr de espinacas cocidas
80 gr de brocoli
1 hojas de laurel
Pimienta
Queso ralladoMODO DE HACER:
Primero picamos el diente de ajo y la cebolla en taquitos pequeños y los rehogamos en una sartén con un poquito de aceite. Cuando estén pochados añadimos la hoja de laurle y el arroz, y lo mezclamos todo bien durante un minuto.
A continuación, añadimos el agua y el cubito de caldo de pollo. Con ayuda de una cuchara removemos bien hasta que se deshaga el cubito, y cuando empiece a hervir, bajamos el fuego a un fuego medio-bajo.
Dejaremos cocer durante 10 minutos y pasado este tiempo, añadimos la pimienta a nuestro gusto, el brócoli y las espinacas ya cocidas. A mi me gusta echar el brocoli crudo puesto que necesita muy poco tiempo de cocción , pero si lo preferís podéis cocerlo un poquito antes de empezar a preparar esta receta.
Dejamos cocer unos 5-10 min o hasta que esté el arroz tierno. Debemos vigilar el agua y si vemos que se nos está quedando muy seco, podemos añadirle un poco más para que quede una especie de arroz caldos.
Apagamos el fuego y añadimos el queso rallado a nuestro gusto. Yo he echado aproximadamente 80 gr. de queso. Lo mezclamos bien y ¡¡YA ESTÁ LISTO PARA TOMAR!!
Opcional: Podemos echarle sal si vemos que está un poco soso. Yo no suelo echarle porque el cubito de caldo de pollo ya trae lo suficiente. También podemos añadirle unos piñones si nos apetece.