INGREDIENTES
1 calabacín
4 huevos
Sal
Pimienta
Pimentón
Ajo molido
100 gramos de queso crema o Skyr
150 gramos de Salmón ahumado
VÍDEO RECETA – Enrollado de calabacín relleno
Cómo se hace el rollo salado de calabacín relleno de salmón y queso
En primer lugar, tenemos que cortar el calabacín en rodajas finas. Lo mejor es que te ayudes de un cuchillo bien afilado o de una mandolina. A mi me resulta más fácil hacerlo con mandolina, así me aseguro que me van a quedar del mismo grosor. Pero si no tienes, seguro que te apañas bien con el cuchillo.
A continuación, en un recipiente abrimos los huevos y los batimos hasta espumar.
Luego agregamos sal, pimienta molida, ajo en polvo y un poco de pimentón, dulce o picante.
Ahora, forramos la bandeja del horno con papel vegetal y lo pintamos con un poco de mantequilla o aceite de oliva.
Luego, vamos a ir empapando cada rodaja de calabacín en el huevo batido. Y las colocamos, empapadas, formando filas sobre la bandeja, superponiendo unas encima de otras.
Haremos este proceso hasta cubrir la bandeja por completo.
El resto de huevo que nos quede en el recipiente, lo volcamos sobre el calabacín.
Precalentamos el horno a 180 grados y cuando esté caliente, metemos la bandeja del horno con nuestro preparado y horneamos durante unos 10 ó 12 minutos, o hasta que veas que el huevo ha cuajado.
Después de hornear nuestra fina tortilla de calabacín, la sacamos y con cuidado de no quemarnos y aún caliente, enrollamos con la ayuda del papel vegetal hasta formar una especie de brazo gitano. Lo dejamos templar o enfriar por completo, así, enrollado, para que coja la forma.
Una vez haya enfriado nuestro rollo salado, lo desenrollamos y lo rellenamos con los ingredientes que más nos gusten.
Yo en este caso he puesto una capa de Skyr, o queso crema de untar, y encima salmón ahumado, para que se pegue al queso.
Una vez lo tengamos cubierto, lo volvemos a enrollar y ya tendríamos lista esta receta.
Yo le he cortado los extremos para que quede más bonito, ya que los bordes quedan un poco raros.
Se consume frío y lo puedes reservar en la nevera, en un recipiente hermético, durante varios días. Aguanta bien.
Lo servimos cortado en rodajas finas o más gruesas. Esto a gusto del consumidor
¡Y devoramos sin remordimientos!
Ahora cuéntame lo que s te pase por la cabeza: ¿con qué rellenarías tú este rollo salado de calabacín? Déjamelo abajo en los comentarios.
¡Ciao!
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