Es una receta que he visto por muchos blogs , aunque con variaciones de uno a otro. Yo he utilizado la de mi amiga Mª Jose , cuyo blog es estupendo y ella aún mas.
Y si queréis probar otra versión, éstas de limón con cobertura dechocolate que he publicado anteriormente , también son cosa fina :)
Notas :
- En la receta original lleva 500 g de harina, pero a mi me llevó algo mas, ya sabemos que todas las harinas no son iguales, asi que lo mejor es ir probando, pero no os paséis porque la masa es blanda y si le agregáis demasiada harina, después no os quedarían esponjosas. Con el reposo, ya queda mas consistente.
- Otra variación que he hecho ha sido añadir canela en el rebozado y también una pizca de sal a la masa.
- Para ayudarnos a hacer las rosquillas podemos aceitarnos las manos ligeramente para que la masa no se nos pegue.
Ingredientes :
4 huevos
1 pizca de sal
200g de leche condensada
1/2 copita de anís
560 g de harina
1 sobre de levadura tipo royal
Aceite de girasol para freírlas
Azúcar y canela para rebozar
Elaboración :
En un bol batimos los huevos con la leche condensada hasta formar una crema.
Agregamos el anís y la harina tamizada con la levadura y la pizca de sal .
Mezclamos perfectamente con una cuchara de madera o espátula . Una vez bien mezclada la masa, hacemos una bola que dejaremos reposar por media hora , si pasa mas tiempo no importa.
Ya reposada la masa, pasamos a elaborar las rosquillas.
Para ello, nos aceitamos las manos ligeramente con el fin de que no se nos peguen y procedemos a pillar pequeñas porciones de masa , le damos forma de bola , hacemos un agujero en el medio y le damos forma de rosca.
En una sartén pequeña o cazo ponemos abundante aceite a calentar. Una vez caliente, vamos friendo las rosquillas con cuidado de que no se nos arrebaten y se hagan por dentro. Cuando están doradas, las retiramos y depositamos en un plato con papel absorvente y de ahí las pasamos por azúcar y canela que tendremos en un bol aparte, hasta que queden bien rebozadas o según gustos de cada cual y las depositamos en una fuente o plato.
Para conservarlas se guardan bien en una lata con buen cierre, aunque en mi casa es raro que duren mas de dos días.