Ingredientes:
- 1 kilo de sardinas en filetes sin escamas ni espinas.
- El zumo de dos limones.
- 6 cebollas.
- 3 dientes de ajo.
- 2 pimientos rojos.
- 3 pimientos verdes.
- 300 gramos de champiñones.
- 2 guindillas.
- 100 gramos de harina.
- ¾ vaso de vinagre.
- ¼ cucharadita de pimienta.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal.
Elaboración:
Lava las sardinas y riégalas con zumo de limón y espolvorea con sal. Corta las cebollas en aros, los pimientos y champiñones en tiras y pica los ajos. Enharina los filetes, sacúdelos para eliminar la harina sobrante. Fríe las sardinas en aceite durante unos 6 minutos, tres minutos por cada lado.
Retira y escurre las sardinas sobre el papel absorbente. Retira el aceite de freír el pescado. Pon más aceite en la sartén y fríe la cebolla y el ajo unos cinco minutos. Añade los pimientos las guindilla, sofríelos diez minutos y retira.
En el mismo aceite fríe los champiñones, retíralos y mezcla con los pimientos. Pone el aceite frito con 1/2 vaso más de aceite, el vinagre, la sal y la pimienta. Dispón las sardinas por capas en una fuente redonda. Reparte por encima el sofrito de cebolla y pimiento. Riega con la vinagreta, pon en el frigorífico y macera toda la noche.
Tiempo de preparación: 40 minutos (sin contar la maceración).
Gasto: 7 euro.
Raciones: 4 raciones.
Dificultad: Fácil.