Los scones son panecillos típicos británicos que se suelen servir con mermelada y mantequilla a la hora del té. Su forma suele ser redonda, aunque hoy en día también se comercializa en forma de triángulos y cuadrados.
Después de echar un vistazo por la red a la variedad de recetas que existen, con huevo, sin él, con buttermilk , con leche, con nata (crema de leche), con patata, dulces, salados... mi duda estaba en hacer la versión redonda más tradicional y rellenarlos con lemon curd o hacer una masa más dulce para disfrutar sin relleno. Y finalmente me decanté por estos últimos. Scones triangulares de naranja con pepitas de chocolate, una combinación deliciosa a la que no le hace falta nada más!
Y que no os engañen a la vista... hubo uno que me dijo que no le tentaban nada y cuando los probó se comió tres de una sentada, jejeje, menos mal que no le parecían apetecibles, sino no me dejaría ni la prueba! Y es que recién hechos están realmente deliciosos y al día siguiente todavía siguen muy ricos. A más ya no llegaron!!!
Son muy sencillos de preparar, no hace falta ni amasar, solo mezclar los ingredientes con cuidado de no calentar la mantequilla. Podéis sustituir las pepitas de chocolate por arándanos, frambuesas, pasas... y omitir el glaseado, aunque le da un plus de sabor a naranja delicioso!
INGREDIENTES:
275 gr. de harina
10 gr. de levadura química
pizca de sal
ralladura de una naranja
1 huevo mediano
100 gr. de leche
75 gr. de azúcar
100 gr. de mantequilla bien fría cortada en cubitos
100 gr. de pepitas de chocolate
un poquito de leche para pincelar
zumo de naranja y azúcar glas para el glaseado
PREPARACIÓN:
En un bol ponemos la harina con la levadura y la sal, mezclamos con el azúcar, la ralladura de naranja y con la mantequilla que debe estar bien fría. Tenemos que conseguir una masa arenosa, como si hiciéramos masa quebrada. Deshacemos la mantequilla con la yema de los dedos y la vamos integrando procurando no calentarla.
Batimos el huevo con la leche. Hacemos un agujero en la mezcla de harina y mantequilla y vertemos el líquido. Integramos con una cuchara de madera. Si lo hacemos con las manos calentaremos mucho la masa.
Añadimos las pepitas de chocolate, las integramos a la masa sin mezclar demasiado.
Ponemos un poco de harina sobre la encimera, volcamos la masa y formamos un círculo de unos dos centímetros de grosor. Lo ponemos en una bandeja con papel de horno y enfriamos al menos media horita.
Precalentar el horno a 180º.
Cortar triángulos de masa y ponerlos sobre la bandeja bien separados. (Me salieron 12 scones. Primero dividí la masa en 4 triángulos y de cada uno hice 3 más pequeños).
Pincelar los scones con leche y hornear unos 20 minutos hasta que estén doraditos.
Preparar el glaseado mezclando zumo de naranja con azúcar glas hasta que no esté ni muy espeso ni muy líquido. Con una cucharita verterlo sobre los scones de forma irregular, como si hiciéramos líneas.
Servir templaditos y a disfrutar!!!
Hasta el próximo día!