Hoy se estrena la sexta y ultima temporada de una de mis series favoritas (si no es la que más me gusta): Downton Abbey. Reconozco que a veces soy un pelín pesado con la serie, pero es que creo que es una de las mejores series de la televisión en todos los sentidos (y sí, también soy fan de Juego de Tronos o The Good Wife, pero las series de época me pierden).
El año pasado celebré la vuelta de la quinta temporada con unos fantásticos scones con clotted cream y mermelada con frutos rojos. Esta vez, vuelvo con unas galletas típicas de Escocia: shortbread. Estas son unas de las galletas más famosas de Reino Unido porque son además muy fáciles de hacer. Son las llamas "1, 2, 3" por las proporciones de sus tres ingredientes: una de azúcar, dos de mantequilla y tres de harina. Esas son las proporciones a seguir siempre en la receta.
Normalmente no llevan nada más, pero últimamente se han puesto de moda con tropezones (pasas, fresas o chocolate) y yo me he lanzado a añadir un poco de vainilla, que siempre queda genial, ¿verdad?
Son unas galletas deliciosas que destacan por su textura quebradiza. Normalmente se sirven en forma de fingers o dedos, como lo he hecho yo (popularizadas por la marca Walkers) o en círculo o triángulos (aunque las encontraréis de todas las formas).
Y volviendo a la serie, ¿qué pasará con Mary? ¿Y con la pobre Edith? ¿Quedarán tranquilos por fin Bates y Anna? ¿Nos regalará Violet nuevos momentazos? De eso estoy seguro. Muero de ganas de ver la boda de Carson y Hughes y sé que echaré de menos a Branson. ¡Qué ganas de que empiece! Por ahora, os dejo el trailer que lanzó ITV hace unas semanas... ¡No os lo perdáis! ¡Y la receta tampoco!
Galletas Shortbread
Dificultad: Fácil
Tiempo horneado: 15 mins (aprox)
Raciones: 25-30 galletas
Etiqueta: Aperitivo dulce, galletas
Trotamundos: Europa
125 gr de azúcar glace + tres cucharadas
250 gr de mantequilla pomada
375 gr de harina normal
Una cucharadita de extracto de vainilla
- Comenzamos tamizando por un lado el azúcar glacé y por otro la harina. Reservamos.
- Mezclamos, a mano, con una cuchara o varillas, la mantequilla con el azúcar glacé, hasta que tengamos una crema blanda, no hay que llegar a blanquear, no estamos haciendo una buttecream.
- Añadimos el extracto de vainilla y mezclamos bien.
- Añadimos la harina de una vez y mezclamos. Yo he acabado mezclando con las manos. Se formarán unas migas que con las manos conseguiremos unir hasta que formemos una bola compacta.- Estiramos la bola formando un rectángulo grande de un centímetro de altura. Ahora cortaremos el rectángulo en tiras y de cada tira sacaremos las galletas del tamaño que queramos. Mis galletas medían como dos centímetros de ancho y cinco o seis de largo, más o menos. Lo hice a ojo.
- Las vamos dejando sobre la bandeja del horno, cubierta con papel film.
- Con un tenedor hacemos los agujeros de la superficie. No tenemos que presionar mucho.
- Metemos en la nevera unos 30 minutos... aunque puede estar hasta un día entero.
- Precalentamos el horno a 185ºC.
- Sacamos las galletas de la nevera y las espolvoreamos con un poco de azúcar glacé. Este paso es opcional.
- Horneamos durante 15 minutos, más o menos, hasta que empiecen a dorarse ligeramente los bordes. Tienen que salir blandas.
- Dejamos enfriar 10 minutos en la bandeja y traspasamos a una rejilla hasta que enfríen por completo.
- Servir acompañando el te o café.
¡A disfrutar!
Fuente: este post proviene de Jaleo en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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