Ingredientes
- Tomates
- Cebollas
- Leche evaporada
- Queso rallado
- Orégano
- Aceite
- Sal
Elaboración
Pelar y picar las cebollas y pocharlas en un poco de aceite. Cuando la cebolla esté transparente, añadir el tomate limpio y en trozos y unas hojas de orégano. Si queréis que la sopa quede bien fina, es mejor que los tomates vayan pelados, para ello, hay que hacerles unos cortes y escaldarlos en agua hirviendo dos minutos, así se pelan muy fácilmente.
Hay que dejar que el tomate se deshaga y esté blando. Batirlo bien hasta que no queden trozos de tomate o cebolla. Agregar la leche evaporada mientras se continúa batiendo. Rectificar de sal y lista.
A la hora de montar el plato se puede poner el queso rallado en el medio de la sopa y espolvorearla con un poco de orégano o añadir unos picatostes de pan.
¿La preferís fría, templada o caliente?