El Taboulé es una ensalada originaria de los países árabes y que tiene como base el cous-cous o el trigo bulgur; suele ir acompañada de tomate, perejil, hierbas aromáticas y zumo de limón, aunque los ingredientes pueden variar al gusto de cada uno. Esta variación es algo menos ligera que el clásico taboulé, pero muy sorprendente por la mezcla de texturas y sabores.
Un plato muy fresco para el verano y así salir de las típicas ensaladas a base de lechuga… que parece que en estas fechas con el calor no hay otra cosa para comer…
Taboulé con higos, queso y frutos secos
Servings: 4 personas
Hora: 20 min.
Dificultad: media
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Ingredientes:
250 gr. de cous-cous
Mantequilla
150 gr. de mezcla de frutos secos (pipas de calabaza, nueces, pasas y almendras)
150 gr. de dátiles frescos
6 higos o brevas
100 gr. de queso fresco
Sal
Ralladura de limón
Menta y perejil picados
Especias: pimienta, curry, pimentón, comino molido y jengibre molido
Cebolla morada para decorar
Cómo hacer taboulé con higos, queso y frutos secos:
Preparamos el cous-cous. Para ello ponemos a hervir 1 vaso de agua (250 ml) con un poco de sal en una sartén. Retiramos del fuego y vertemos 1 vaso de cous-cous (250 gr). Remover y dejar reposar 3 minutos. Añadimos una cucharada pequeña de mantequilla y volvemos a colocar la sartén a fuego lento durante 2-3 minutos removiendo regularmente con un tenedor. Dejar enfriar.
Cuando esté frío añadimos las especias: pimentón, curry, comino molido, jengibre, pimienta, ralladura de limón, menta y perejil picado. Y lo mezclamos bien. No os paséis con las especias, son sólo para aromatizar, no debe tener un sabor fuerte.
Incorporamos al cous-cous la mezcla de frutos secos. Yo he utilizado un bote que venden en Mercadona para ensaladas con pipas de calabaza, nueces, pasas y almendras; pero podéis utilizar cualquier mezcla que tengáis a mano o prepararla vosotros mismos machacándolos con un mortero.
Troceamos el queso fresco y los dátiles en pequeños trocitos y lo añadimos al cous-cous. Si quieres puedes utilizar queso feta.
Pelamos los higos y los troceamos con una forma bonita.
Servimos el taboulé en cuencos y lo decoramos con un poco de queso fresco troceado, los higos y un poco de cebolla morada picada, que resaltará sobre el blanco del queso dando un toque llamativo al plato.
Degustación:
Podéis servir este taboulé como entrante o como acompañamiento a una carne a la parrilla. Quedará estupendo con unos pinchos de carne adobada al estilo oriental.
Fuente: este post proviene de Cooking Experiences, donde puedes consultar el contenido original.
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