Ohhhhhhhhhhhhhhhhh... ¡Sorpresa!
Un día tontorrón lo tiene cualquiera, a decir verdad tengo muchos de estos que pasan sin pena ni gloria y que caen en el más profundo de los olvidos.
Pero cuando uno de estos días, al llegar a casa, hay un paquete que no esperabas deseoso por ser abierto para que descubras lo que hay en su interior... bueno vale, el paquete no estaba saltando de alegría, pero yo sí #Emoción #Nervios, es el indicio de que tu día puede cambiar.
¿Qué puede contener una cajita para que a una servidora se le endulce el día?
Pues, sin duda, ¡Cocholate! y se ve que los señores de Nestlé Postres lo sabían... ¡Toma ya!
Así es como comienza mi colaboración para ser uno de los ceros de la imagen que Nestlé ha creado para celebrar 1.000.000 de fans en su facebook... sí, soy ¡el primer cero! y es que en la caja también venía un fantástico molde con forma de cero por gentileza de Lékué.
Tengo que confesar que tuve percances con el bizcocho, torpeza se llama, y el primero que salió del horno se precipitó de mis manos y acabó esparcido por el suelo de mi cocina (este suicidio bizcochero acabó en cero destrozado y, por supuesto, catado... riquísimo), así que aquí el resultado del segundo intento.
TARTA COCHOLATE Y ALMENDRAS
BIZCOCHO
2 huevos L
120 gr azúcar
160 gr mantequilla sin sal
300 gr cocholate nestlé postres negro
150 gr almendra molida
80 gr harina
16 gr levadura polvo
Molde con forma de cero LékuéGANACHE COCHOLATE
100 gr cocholate nestlé postres negro
170 gr cocholate nestlé postres leche
250 gr nata (crema de leche) 35% MG
DECORACIÓN
Virutas de cocholate
Para el bizcocho
Derretir el cocholate troceado en el micro, golpes cortos a baja potencia para que no se queme y moviendo cada vez (al baño maría también se puede hacer). Reservar para que baje su temperatura.
Derretir la mantequilla y reservar también para que baje su temperatura.
Tamizar la harina con la levadura.
Varillas en mano (preferiblemente eléctricas si no quieres hacer brazos), mezclar los huevos con el azúcar hasta que dupliquen su volumen.
Añadir la mantequilla derretida y mezclar a baja potencia.
Añadir poco a poco, y sin dejar de batir, la almendra y la harina con la levadura. También el cocholate derretido. Mezclar a baja potencia sólo hasta que la masa quede homogénea.
Engrasar el molde con spray desmoldante (en su defecto mantequilla) y hornear 180º C calor arriba y abajo durante 25-30 minutos... o hasta que al pinchar con un palillo salga limpio. Ojito con los hornos que cada uno es diferente.
Sacar del horno... ¡cuidado que quema!
Dejar que se enfríe sobre una rejilla y desmoldar con mucho cuidado.
Para la ganache
Calentar la nata (crema de leche) y el cocholate en una cazo sin dejar de mover hasta que el cocholate esté completamente derretido y la mezcla sea homogénea.
Retirar del fuego y reservar hasta que se enfríe y adquiera consistencia para trabajar con manga (introducir en el frigorífico para trabajar con mayor rapidez, aún así hay que hacerlo con unas horas de antelación).
Para el montaje
Cubrir el cero con la ganache y decorar con manga pastelera y virutas de cocholate al gusto.
Lo se, soy un cero y un cero no es nada, ni suma, ni resta, ni tiene valor, es la peor puntuación para valorar algo, nadie quiere un cero, pero... ¿y un cero supercocholatoso? que el cocholate es un preciado tesoro... ¡como cambia la cosa!
¿Quién quiere ahora un cero?
Nos vemos pronto Churretos@s.
Besos.
Raquel