La horchata es uno de los tesoros más preciados que tiene la gastronomía valenciana. Se trata de una bebida refrescante conocida en todo el mundo, típica y autóctona, con una larga historia y un reconocimiento y prestigio probado, gracias sobre todo a la Denominación de Origen Chufa de Valencia.
Alrededor de la horchata se acumulan mitos, leyendas, curiosidades y anécdotas de lo más interesante. Se dice que era bebida de los faraones, pues en el antiguo Egipto se encontraron chufas en el interior de tumbas y sarcófagos.
Esta bebida reduce el colesterol, ayuda a la digestión y disminuye los gases. Como no contiene cafeína ni ningún otro estimulante puede ser consumida por niños, ancianos y mujeres embarazadas. También es buena para los deportistas porque les proporciona energía, y apta para celíacos, ya que no contiene gluten.
Con ella se pueden hacer más cosas de las que imaginamos como cócteles o postres como la tarta que vamos a elaborar hoy.
Los ingredientes que vamos a necesitar son:
Para la base:
200 g de galletas napolitanas
100 g de mantequilla
Para la crema:
1 l de horchata
2 sobres de cuajada
200 g de queso crema
Para decorar:
Canela
Preparación:
Lo primero que vamos a hacer es preparar tanto los ingredientes como los utensilios que vamos a necesitar.
Tenemos varias opciones, hacer una única tarta que podemos cortar en porciones individuales o preparar tartas individuales. Normalmente suelo hacer una tarta única porque es más trabajoso hacer las individuales y necesitan más espacio tanto en la nevera como en el congelador, espacio que no suelo tener. Si tu elección es hacer tartas individuales, pero no tienes moldes para ello, puedes hacerlos con papel de acetato.
Creamos una plantilla para decorar nuestro postre si no tenemos ya una.
Comenzamos con la base de la tarta, triturando las galletas. Lo podemos hacer con un robot de cocina, una batidora o metiéndolas en una bolsa y pasarle un rodillo. A continuación, colocamos la mantequilla en un cazo que ponemos al fuego hasta que se derrita.
Mezclamos la mantequilla con las galletas molidas hasta obtener una mezcla homogénea. Extendemos la mezcla sobre la base del molde y compactamos con ayuda de una cuchara o la base de un vaso. Metemos en el congelador para que se endurezca bien mientras preparamos la crema.
Lo primero que vamos a hacer es separar un vaso de horchata. Vertemos los dos sobres de cuajada en el vaso de horchata que se ha reservado y removemos bien hasta que se disuelvan. Reservamos
Introducimos el resto de la horchata junto con el azúcar y el queso crema en un cazo que ponemos a fuego medio. Removemos hasta que comience a hervir.
Añadimos el vaso de horchata con cuajada y removemos hasta que comience a hervir de nuevo y retiramos del fuego.
Sacamos el molde del congelador y vertemos el preparado de horchata. Dejamos templar a temperatura ambiente y, a continuación, lo llevamos a la nevera.
Dejamos reposar la tarta en el frigorífico al menos 4 horas para que asiente bien. Es mejor prepararla un día antes.
Presentación:
Una vez fría, la sacamos del frigorífico, la desmoldamos y la colocamos en una base de tarta o plato de presentación. Ponemos la plantilla y decoramos espolvoreando canela en polvo sobre la plantilla, retiramos la plantilla con cuidado y servimos.
¿Qué te parece esta receta? Los sabores, texturas y aromas te van a sorprender y te transportarán a una tarde veraniega en Valencia.
Bon appétit!