Tarta sin horno y sin gelatina, refrescante y fácil de preparar
Llámala tarta fría de limón y leche condensada, postre frío de leche condensada y limón, postre fácil sin horno y sin gelatinas... puedes llamarlo como más te guste pero eso sí, cómo no puedes llamarlo por ejemplo es postre apto para dietas porque no lo es. Si, lo sé, me he pasado, pero llevo una racha un poco mas adicta al azúcar de lo normal y con la excusa de que era el cumpleaños de Hélder y quería hacer una tarta, esta fué la mas adecuada.
No tenía horno, no tenía mucho tiempo porque sencillamente me lancé el día antes y mirando por la red propuestas y propuestas, casualmente tope con esta receta de la que había oído hablar a mi tía Sole y oye, que buena cosa.
Pocos ingredientes, poco tiempo y resultado de 10, sin duda la tarta perfecta para estas fiestas.
Si estáis buscando un postre para estas navidades, esta propuesta lo tiene todo,refrescante, muy rica, fácil de hacer, se puede dejar hecha el día antes, se prepara en cuestión de minutos y lo mejor es que es un éxito Seguro.
Si aún no lo tenéis claro, seguro que al ver el corte de la tarta no vais a dudar ni un instante, creerme si os digo que está buenísima.
Además de esta tarta fría podéis encontrar muchas propuestas en el blog, tarta de leche merengada, tarta mousse de naranja baja en calorías, tarta de queso y mango... y muchas otras mas ¿qué os parece?¿ tenéis claro cual es vuestra favorita?
Os recuerdo que podéis seguirme también en facebook e instagram. Feliz semana a todos.
Ingredientes:
un bote pequeño de leche condensada
400 ml de nata (crema de leche) para montar
150 ml de zumo de limón
galletas hojaldradas
ralladura de limón
chocolate blando Elaboración:
En un cuenco mezclamos la leche condensada y la nata (crema de leche).
Añadimos poco a poco el zumo de limón sin dejar de mover.No taremos que poco a poco la mezcla empieza a espesar
Forramos un molde con papel con hornear, ponemos una tanda de galletas hojaldradas, crema de limón, galletas, crema, así hasta terminar con crema. Cubrimos con papel transparente y dejamos en la nevera mínimo 4 horas.
Un vez desmoldada decoramos con chocolate blanco y ralladura de piel de limón.
Fuente: este post proviene de Cocina para pobres, donde puedes consultar el contenido original.
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