Posiblemente es uno de los platos más bonitos que he preparado, a la altura del fantástico monkey bread.
Esta tarta es una masa de brioche rellena. Las posibilidades de relleno son infinitas, aunque yo he seguido al pie de la letra el que propone Jeffrey Hamelman en "El pan", lugar de procedencia de esta receta.
Según su consejo, podemos rellenarla de otra cosa siempre y cuando el relleno no sea muy húmedo porque no permitiría que la base de la tarta se cociese bien.
Eso sí, no os voy a engañar: hay que tener paciencia. Hacer 40 bolitas de masa no se hace en un momento.
INGREDIENTES (para un molde redondo de 26 centímetros):
Para la masa:
Harina panadera: 300 gramos.
Harina de fuerza: 150 gramos.
Huevos: 3 (2 para la masa y uno para pintar el brioche).
Azúcar: 40 gramos.
Sal: 10 gramos.
Mantequilla: 80 gramos.
Leche: 120 mililitros.
Levadura seca de panadero: 6,6 gramos (si utilizamos levadura fresca serán 20 gramos).
Para el relleno:
Ajo: 2 dientes.
Setas: 170 gramos.
Pimiento rojo asado en rodajas: 2 medianos.
Sal.
Pimienta.
Albahaca.
Perejil.
Tomillo.
Requesón: 142 gramos.
ELABORACIÓN:
Sacamos la mantequilla de la nevera para que se atempere.
En un bol mezclamos todos los ingredientes y amasamos. Cuando la masa esté lista añadimos la mantequilla (es muy importante que esté a temperatura ambiente para que podamos trabajar con ella) y volvemos a amasar hasta que esté totalmente integrada.
Pasamos la masa a un bol limpio y la dejamos levar tapada con papel film hasta que doble su volumen.
Mientras la masa leva prepararemos el relleno, ya que tiene que estar frío cuando vayamos a utilizarlo.
En una sarténcon un poco de aceite de oliva, sofreímos el ajo picado durante un minuto. Añadimos las setas, lavadas y troceadas, y las sofreímos hasta que se ablanden, unos 5 minutos. Añadimos el pimiento asado y sofreímos durante 2 o 3 minutos. Apagamos el fuego y sazonamos con sal, pimienta, albahaca, perejil y tomillo. Reservamos.
Una vez que la masa ha subido la volcamos en la superficie de trabajo ligeramente enharinada y desgasificamos levemente.
Dividimos la masa en dos: una pieza de 300 gramos y la otra de 480(aproximadamente).
Cogemos la porción pequeña y la estiramos dándole forma redondeaday con un grosor máximo de 6 milímetros. Untamos el papel de horno y el borde del molde desmontable con mantequilla. Si no tenemos un molde desmontable podemos utilizar un aro de emplatar de las mismas medidas.
Colocamos la masa dentro del molde, intentando que una parte de la masa quede en las paredes.
La metemos en la nevera 10 minutos.
La sacamos de la nevera y con el dedo presionamos los bordes de la masa para formar el borde de la base.
Con la otra pieza de la masa cortamos porciones de 10-12 gramos. Boleamos cada trocito de masa.
Sobre la base de la tarta esparcimos el requesón. Encima colocamos las verduras. Terminamos colocando las bolitassobre las verduras. Es importante que no queden muy apretadas, ya que van a crecer durante la cocción. Si nos sobran bolitas no pasa nada, no hay que intentar meterlas en el molde (a mi me sobraron 6).
Encendemos el horno a 30ºC y metemos la tarta dentro durante 30 minutos.
Sacamos la tarta del horno y calentamos el horno a 190ºC, con calor arriba y abajo.
Antes de meter la tarta en el horno, batimos un huevo y con él pintamos las bolitas.
Horneamos durante 35-40 minutos. Si vemos que coge demasiado color podemos bajar la temperatura 10ºC, nunca acortaremos el tiempo de cocción porque si no la base quedará cruda.
Sacamos la tarta del horno y la dejamos enfriar 30 minutos antes de desmoldarla.