Un plato fantástico para estas fiesta. Lo dejas preparado y a disfrutar.
Ante todo, siento decir que no me gusta el pescado crudo y por este motivo he marinado el salmón fresco. Ha estado congelado durante más de 48 horas por el problema del anisakis.
Ya sé que para algunos paladares el pescado crudo es un verdadero manjar.
Esta opinión la respeto y la admiro.
Ingredientes para 6 comensales
400 g de salmón fresco limpio de espinas
300 g de salmón ahumado
3 cucharadas de vino blanco
3 cucharaditas de mostaza a la antigua
1 cebolla mediana fresca
8-10 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
2 cucharadas de salsa de soja
eneldo fresco
4 pepinillos en vinagre o algunas alcaparras muy troceaditas
1 huevo cocido
Salsa tártara: mayonesa con unos pepinillos, cebolla fresca, una cucharadita de mostaza y 1 huevo cocido. Todo muy picadito.Preparación
Para marinar el salmón fresco mezcla en un bol 150 g de azúcar y 150 g de sal fina. Cubre el fondo de una fuente con esta mezcla, coloca el salmón con la piel encima de esta mezcla y cubre la parte superior con el resto de la mezcla por todos lados. Déjalo en el frigorífico durante 24 horas, pasado el tiempo escurre, envuélvelo en papel de cocina y de nuevo al frigorífico durante 2 o 3 días.
Ya lo podrás utilizar junto con el salmón ahumado, la cebolla fresca, el eneldo, el huevo cocido y los pepinillos. Todo muy troceado. Reserva.
En un bol une el vino, la salsa de soja, el aceite y la mostaza. Remueve, liga todos estos ingredientes y añádelo a la mezcla de salmón reservada. Vuelve a remover hasta que todo esté totalmente integrado. Deja macerar hasta la hora de servir.
Emplata colocando el tartar en un aro de medida individual, así hasta 6.
Retira el aro y acompaña con la salsa tártara. Es mejor poner esta al lado y no encima, así podrás tomar la cantidad ajustada a tu gusto.