Me encanta.
Es uno de esos postres a los que no se decir que no. Y con tantas variaciones y posibilidades... Bufff.
Fácil de hacer y riKo, riKo.
¿Vamos con él?
Ingredientes:
150 gr de Mascarpone
120 gr de bizcochos de soletilla o sobaos pasiegos
350 gr de fresas (alguna más para decorar)
8 semillas de cardamomo
(4 más para decorar)
60 gr de azúcar glas
4 huevos
El zumo de 1 limón
Pellizco de sal
Lava y escurre las fresas, trocéalas en dados pequeños y ponlas en un bol con el zumo de limón, 20 gr de azúcar glas y las semillas de cardamomo chafadas. Cubre con film y reserva en la nevera, al menos 1 hora.
Separa las claras de las yemas. Con unas varillas, bate las yemas con el resto del azúcar glas hasta obtener una mezcla cremosa. Añade el mascarpone y sigue batiendo hasta que se ligue.
Monta las claras a punto de nieve con una pizca de sal e incorpóralas cuidadosamente a la mezcla anterior.
Desmenuza los bizcochos (o los sobaos) hasta desmigarlos por completo.
Distribuye las fresas maceradas en el fondo de cuatro copas. Cúbrelas con una capa de 1 cm de de la miga de los bizcochos (sobaos) y añade una cucharada del liquido de la maceración, antes de cubrir con la crema.
Sellamos los vasos con film y dejamos reposar, como mínimo, 12 horas en el frigorífico.
Decora cada tiramisú con una fresa cortada por la mitad y una semilla de cardamomo