Esta delicia, tendría que haberla publicado antes, es una receta es para lo que aman el dulce, es un postre tradicional de la gastronomía española, de los más famosos y con razón. Es originario de Jerez de la Frontera (Cádiz), muchas teorías señalan que esta elaboración proviene del siglo XIV, más concretamente del año 1324, y que sus precursoras fueron las monjas del Convento de Espíritu Santo, de esta ciudad. Así pues, las bodegas de Jerez, utilizaban gran cantidad de claras, para "clarificar" el vino, y las yemas no se utilizaban, de este modo, las monjas sacaron partido de ellas, elaborando este fantástico postre.
Este dulce de color amarillo y de textura similar a la del flan tiene una elaboración muy sencilla, pues solamente se utiliza agua, azúcar y yemas. Pero en la preparación, sin embargo, hay que tener cuidado, pues la textura y la capacidad de temblar dependen de una ejecución cuidadosa y delicada.
INGREDIENTES:
6 yemas de huevo
1 huevo entero
250 ml de agua
250 ml de azúcar
Para el caramelo líquido
125 gramos de azúcar
1 cucharada sopera de zumo de limón
4 cucharadas de agua
ELABORACIÓN:
1.- Haremos el caramelo líquido, hay que tener cuidado, pues alcanza mucha temperatura y las quemaduras son importantes. Si veis que queda caramelo pegado en la cacerola, dejarlo en agua y solo se diluye el caramelo.
Pondremos en una cacerola el zumo de limón, el azúcar y agua, a fuego fuerte; cuando hierva y vaya tomando un color tostado retiramos y dejamos templar unos 3 minutos y será el momento de cubrir el fondo del molde y las paredes.
2.- Hacemos el almíbar. Ponemos 250 de agua y 250 de azúcar y cocer. Lo dejamos a fuego lento 10 minutos. Pasado ese tiempo apagamos el fuego y dejamos reposar 5 minutos. Si le añadimos muy caliente el almíbar a las yemas pueden cuajarse.
El almíbar debe de estar a punto de hebra. Para conseguir esto, una vez que haya cocinado unos 10 minutos el almíbar, lo dejamos templar. Cuando esté templado cogemos una cuchara y nos pringamos un poco con el dedo, si se forma una pequeña hebra, lo tenemos listo.
3.- En un bol, mezclamos las yemas con el huevo entero y agregamos el almíbar en forma de hilo. Cuando esté todo bien integrado lo vertemos en el molde, si lo queremos fino, podremos un colador para pasarlo.
4.- Tendremos el horno precalentado, 180º, calor arriba y abajo, con una bandeja con agua para que también este caliente. Introducimos el molde, en el horno durante unos 40 minutos al baño maría; si el molde es cerrado mejor, si el molde tiene tapa se la pondremos y si no un papel de aluminio, .
Dejamos templar en la nevera.
Lo servimos con helado de vainilla.