No sé si alguna vez habéis pedido pizzas en esa empresa tan famosa que sirve a domicilio.
En casa lo hemos hecho a veces y yo siempre pido también unos triángulos de pan de ajo que están buenísimos.
Estos no son exactamente iguales, de hecho, a pesar de llevar cuatro dientes de ajo el sabor es muy suave, debería haberle puesto más.
Pero aunque no son como los famosos panecillos de esa franquicia, están muy ricos, que es lo importante.
Recuerdo que cogí la receta de algún grupo de cocina en los que participo, pero,perdonadme porque no apunté el nombre de la persona que lo puso. Desde aquí le doy las gracias por esta maravilla.
INGREDIENTES: Para unos 35 triángulos
4 dientes de ajo
100 gr de mantequilla a temperatura ambiente
2 cucharaditas de sal
160 ml de leche
1 yema de huevo
1 sobre de levadura de panadero (la que viene granulada)
1 cucharadita de azúcar
375 gr de harina de trigo
80 ml de aceite de oliva suave
PREPARACIÓN:
Ponemos los ajos pelados en el vaso de la thermomix y trituramos 5 segundos a velocidad 7. Bajamos los restos hacia abajo y colocamos la mariposa. Echamos la mantequilla, yema de huevo y sal y batimos 30 segundos a velocidad 3. Quitamos la mariposa y vertemos esta mezcla en un recipiente. Reservamos en la nevera.
Ponemos la leche, el azúcar y la levadura en el vaso y calentamos 2 minutos a 37º y velocidad 2. Agregamos la harina y el aceite, mezclamos 20 segundos a velocidad 5 y luego programamos 3 minutos a velocidad espiga.
Sacamos la masa, hacemos un rulo alargado y cortamos en cuatro partes mas o menos iguales. Vamos cogiendo cada porción y estiramos hasta dejarla de un grosor de medio centímetro aproximadamente. Untamos la mantequilla de ajo que teníamos reservada y enrollamos como si fuera un brazo de gitano. Cortamos porciones triangulares y colocamos en una bandeja de horno forrada con papel vegetal.
Hacemos lo mismo con las demás porciones. Antes de hornear las pintamos con la mantequilla de ajo (os va a sobrar, pero si veis que habéis hecho la justa, dejad un poco para pintar los triángulos).
Horneamos a 180º unos 20 minutos, hasta que los veamos dorados.
Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.
SIN THERMOMIX:
En el vaso de la batidora eléctrica trituramos el ajo. Ahora vamos a usar las varillas para montar el ajo con la mantequilla ablandada, la yema y la sal. Reservamos en la nevera.
En un cazo entibiamos la leche, muy poquito, y diluimos en ella el azucar y la levadura.
En un recipiente hondo, hacemos un volcán con la harina y añadimos la leche tibia, amasamos con las manos un poco y añadimos el aceite para acabar de amasar hasta que nos quede una masa homogénea y elástica fácil de trabajar. A partir de aquí, seguimos como se indica arriba.
Ponemos los ajos y los trituramos.
Ya están picaditos.
Añadimos la mantequilla, la yema y la sal y con la mariposa puesta lo montamos. Reservamos.
Dejamos la mantequilla en la nevera.
Entibiamos la leche con la levadura y el azucar.
Incorporamos la harina y el aceite y amasamos.
Sacamos la masa y hacemos un rulo.
Lo dividimos en cuatro partes, más o menos iguales.
Estiramos cada porción y untamos de la mantequilla de ajo.
Enrollamos y cortamos en triángulos.
Ponemos en una bandeja de horno y pintamos con la mantequilla.
A algunos les he espolvoreado perejil seco. Horneamos.
Unos bollitos de pan con un ligero sabor a ajo. No podrás comerte solo uno.
Salen muchos y quedan muy tiernos y suaves.