Según figura en el manuscrito, base del Reto Nazarí, cuenta la Leyenda, que en Arabia, vivía una joven pareja de recién casados, él era un prestigioso médico y ella colaboraba con él en su profesión. Un día de Mayo la joven pareja descubrió que esperaba su primer retoño.
Pero la suerte de la pareja cambió y un día la amada del médico perdió al hijo que esperaba; fue un duro golpe para la pareja pero poco tiempo después tuvieron el mismo problema. El médico de nuestra leyenda dejo de lado su actividad y empezó a investigar la solución para este problema.
Transcurrieron tres años de investigación, y tras este tiempo el médico descubrió que el causante de las pérdidas era la presión y el estrés que sufría su amada. Descubrir esto fue la parte sencilla, lo complicado era resolver el problema y que medicina aplicar para solucionarlo.
Así que el médico empezó a investigar con plantas y hierbas tradicionales, pero no encontraba la aplicación mágica que solucionara el problema. Transcurrieron los años y nuestro médico no daba con la solución, hasta que un día pensando en su infancia recordó como antes de dormir su madre le daba un dátil para relajarlo y que descansara bien.
De forma desesperada empezó a investigar las propiedades de este fruto y descubrió que era la solución para luchar en contra del estrés. Solo le quedaba solucionar un último paso como conseguir que su amada esposa ingiriera los dátiles en la cantidad óptima para que fueran efectivos.
Tras mucho discurrir elaboró una receta que llamaría Turun y la cual aplicaba a su mujer para desayunar y después de almorzar. De esta forma la pareja de nuestra historia consiguió tener su primer hijo, al cual llamarían Turun, y nuestro médico publico un tratado llamado "De medicinis et cibis semplicibus"
Ingredientes
250gr de Dátiles sin hueso.
250gr De Nueces.
100gr De Pistachos Y Piñones mezclados.
250gr De Azúcar.
Zumo de un limón.
Aceite
Azúcar glacé.
Vamos a empezar picando los dátiles a trozos pequeñitos, pasamos las nueces por la picadora y exprimimos el zumo del limón. Disolvemos el azúcar en un bol con 4,5 cucharadas de agua y lo ponemos en una cacerola a hervir hasta conseguir un color acaramelado sin moverla.
Retiramos del fuego y le añadimos el zumo de limón, los dátiles picados, las nueces trituradas y los piñones y los pistachos enteros.Cocinamos sobre fuego moderado durante 10 minutos y entonces apartaremos.
Ahora vamos a moldearlo, yo he hecho una tableta del turrón de dátiles entera, utilizando medio cartón de leche cortado transversalmente, lo he utilizado para otros turrones y no se pega pero esta masa era pegajosa y por si acaso le di con el pincel al fondo. Extendí bien la masa ayudándome con una cuchara que moje también en el aceite y llene todo el molde. Listo.
Luego coloque sobre un trozo de papel de horno el resto de la mezcla y con la espátula, pincelada con aceite empece a trabajarla. Es muy facíl de manejar y moldear. Se puede hacer la tableta de turrón sin necesidad del molde anterior, pero así queda mas limpito y cómodo para guardar.
Con cortadores de galletas, o te olvides de aceitarlos con el pincel, hice varias figuritas y algunas de ellas la pinche en una brocheta a modo de piruleta, esta opción esta muy bien porque así no tienes que chuparte los dedos luego, jajaja!! porque te los chuparas seguro.
Después volví a formar un bloque con la mezcla y los corte en barritas pequeñas individuales, ya ves que puedes presentarlo de muchas formas diferentes. Ah!! y también puedes espolvorearle azúcar glass por encima que también queda muy bonito. Ya a tu gusto... yo lo puse de las dos maneras
Bueno pues ya esta, se ha acabado por este año.. hoy es el ultimo reto nazarí y además es día 31 de diciembre, el ultimo día del año 2013, para mi la verdad que este no ha sido muy buen año, Las cosas no han salido precisamente bien, pero bueno... hay cosas que tienen que pasar, sea en un año u otro y que además no podemos evitar.
Y otras que ocurren y a veces nos hacen mas fuertes, hay que mirar el lado bueno de cada una de ellas, que aunque creamos que no, siempre lo tienen. Hay que buscar ese rinconcito de esperanza que te reconforta y te da fuerza y a arrancar de nuevo. A ver si el próximo año entra con alegría y las cosas empiezan a mejorar para todo aquel que lo necesite.
Y ya de broma vamos a ver que pasa, dejamos el 13 que siempre ha sido símbolo de mala suerte y entramos en el 14, ¡¡¡¡la casa de los locos!!! jajaja!!
¡¡¡BRINDO POR QUE TODO VAYA MEJOR PARA TODOS, POR LA FELICIDAD, POR LA SALUD POQUE DISFRUTEMOS CADA SEGUNDO DE LOS NUESTROS, POR LA VIDA!!
¡¡¡FELIZ AÑO NUEVO!!!