Este fin de semana ya se respira aire navideño en la capital. Ayer viernes se dio el pistoletazo de salida a estas fiestas, con el encendido de las luces navideñas en las principales calles de Madrid. ¡Ya huele a Navidad!
También huele a celebración, porque hoy cumplimos 4 años desde que cocinábamos con naranjas en el 2013, desde que el Reto "Alfabeto Dulce" nació para darnos tantas alegrías y sobretodo para ayudarnos a compartir entre todos tantas y tantas recetas.
Nada menos que veintisiete son los ingredientes que hemos utilizado en la primera vuelta y treinta y seis los que llevamos utilizados en la segunda, de la que apenas quedan nueve letras y por lo tanto, dieciocho ingredientes más. ¿Y luego qué? Pues luego Dios dirá... Es algo que decidiremos entre todos como siempre hacemos, porque este reto es de todos.
Siempre digo que este reto no hubiera sido posible si no fuera por vosotros y así es. Sois vosotros los que le habéis dado vida, yo lo único que he hecho ha sido ponerlo en marcha, pero vosotros habéis cocinado mes a mes, habéis hecho auténticas virguerías por llegar a tiempo aún teniendo otros compromisos.
Muchos habéis pasado por aquí, habéis formado parte de esta gran familia y luego nos habéis tenido que dejar, cada uno por diferentes motivos. Ya sabéis que la puerta del Reto "Alfabeto Dulce" nunca estará cerrada para quién quiera volver, porque como siempre digo, este reto no es una obligación, sólo una manera de pasar un rato divertido entre compañeros a los que nos une una misma pasión: la repostería.
Este mes, el penúltimo del año, nuestras compis Sonia del blog "Recetas de andar por casa" y Patty de "La Taza de Loza" han elegido dos ingredientes que combinan a la perfección y con los que se puede ir ensayando la preparación de postres para las comidas y cenas que se avecinan en esta época del año.
Como ya sabéis, en noviembre cocinamos con bizcochos de soletilla, especie de galletas alargadas con los extremos redondeados y forma de dedo, dulces, secas y con un ligero sabor a vainilla y que son la base de muchos postres. Tenía mis dudas, pero he estado investigando y se consideran bizcochos de soletilla tanto los tradicionalmente pegados al papel de hornear, más planos y esponjosos, como los más entrechos y alargados, secos y con azúcar por encima que conocemos como "lady fingers".
La granada, el otro ingredientes elegido, es una "superfruta" propia de la temporada otoñal, que tiene un ligero sabor agridulce. Rica en antioxidantes, muy beneficiosa para la salud y con propiedades diuréticas por su alto contenido en potasio. En cocina se puede usar fresca o para la elaboración de zumos y es ideal para acompañar algunos postres como el yogur. También es muy adecuada para elaborar mermeladas y jaleas y con ella se prepara la granadina, muy usada en coctelería.
Yo he preparado un postre que, como os decía, bien podría ser el fin de fiesta de alguna de las próximas celebraciones navideñas. Es una espuma de queso crema y granada servida en vasitos. A continuación os cuento cómo la he preparado.
INGREDIENTES
Para la base
14 bizcochos de soletilla
40 gr. de mantequilla
2 cucharadas de azúcar
Para la espuma de queso
300 gr. de queso crema
200 gr. de nata (crema de leche) líquida para montar 35% M.G.
100 gr. de azúcar
1/2 granada + 2 cucharadas de azúcar
50 gr. de chocolate blanco
Para la decoración
Semillas de granada
Ramitas de romero
ELABORACIÓN
Primero vamos a preparar la base de bizcochos. Para ello trituramos los bizcochos, añadimos la mantequilla derretida y el azúcar y mezclamos bien. Reservamos.
Vamos a preparar el sirope de granada. Ponemos la granada con dos cucharadas de azúcar y un chorrito de agua en un cazo y llevamos a ebullición. Bajamos el fuego y dejamos que cueza unos minutos hasta que el líquido espese. Trituramos con una batidora de brazo y colamos para eliminar las semillas.
Para hacer la espuma de queso y granada, primero montamos la nata (crema de leche) y una vez haga picos la reservamos en el frigorífico. En un recipiente ponemos el queso, el azúcar, el sirope de granada y batimos con las varillas eléctricas. Añadimos el chocolate blanco derretido y seguimos batiendo hasta que se incorpore. Por último agregamos la nata montada (crema de leche) y mezclamos con ayuda de una espátula, con movimientos envolventes para que no pierda consistencia.
Para montar los vasitos ponemos un poco de la mezcla de galleta. A continuación con una manga pastelera rellenamos con una capa de espuma de queso y granada. Ponemos otra capa de mezcla y de galleta y por último otra capa de espuma de queso.
Decoramos con unas semillas de granada y unas ramitas de romero. Podemos añadir un poco de sirope de granada por encima.
Es un postre sencillo pero a la vez muy rico, fresco y muy ligero por el aire que lleva incorporado. Lo he presentado en vasitos porque ya sabéis que me encantan este tipo de postres en formato individual, sobretodo cuando tenemos invitados en casa. Nos olvidamos de tener que servir el postre, como si de una porción de tarta se tratase (mis queridísimas amigas Bea y Mariana, entienden lo que quiero decir).
El ligero sabor ácido de las granadas se contrarresta con el dulzor del chocolate blanco y hace que este postre tenga un sabor equilibrado y nada pesado.
Bueno y vamos a por el quinto año de #RetoAlfabetoDulce ¿no? Quién me iba a decir que aquella idea que un día se me ocurrió iba a tener tan buenísima acogida entre tanta gente y que íbamos a formar una bonita familia repostera.
De nuevo ¡muchas gracias! a todos por vuestra participación y sobretodo por vuestra implicación mes a mes en hacer la vida más dulce. Os recuerdo que tenemos también un grupo en Facebook para quién quiera estar al tanto de todo lo relacionado con el reto.