Así, además de los domingos de paella, otra de las tradiciones en mi familia es el 'día de la pasta', en el que preparo una buena olla y varias salsas para acompañar, y cada uno disfrutamos así de nuestra receta favorita (o, mejor dicho, combinamos un poco de cada una…). Pero, en lo que todos coincidimos es en que la pasta Garofalo es de las mejores que hemos probado, una marca que se define por la experiencia y la tradición, y que trae a nuestras casas un producto auténtico italiano.
¿Por qué utilizo pasta Garofalo y no otra?
Hace 230 años, en el pueblo de Gragnano, en Nápoles, reconocido desde el siglo XVI como ‘la cuna de la pasta’, nacía la empresa Pastificio Lucio Garofalo SpA, bajo una licencia para elaborar ‘pasta de alta calidad’. 230 años de experiencia de diferentes generaciones que, unidas a las recientes innovaciones descubiertas y a una pasión inexplicable por el oficio, le lleva a Garofalo a subir posiciones en la búsqueda de la perfección.
Así, como resultado de llevar el conocimiento artesanal a la producción industrial, Garofalo nos ofrece una pasta con un sabor y aspecto únicos, y con las siguientes particularidades:
- El sabor y el color del trigo: desde Garofalo seleccionan la que consideran la mejor sémola del mundo.
- Firmeza perfecta y elasticidad, aunque nos pasemos con el tiempo de cocción.
- Consistencia excepcional: después de la cocción, e incluso minutos después, esta pasta mantiene su color dorado, su textura y su forma.
- Correcta porosidad: en Garofalo se utilizan moldes de bronce que permiten obtener una superficie porosa concreta en función del tipo de pasta, ya que hay algunas que deben absorber más la salsa que otras. Además, ofrecen más de 100 cortes de pasta diferente y revisan constantemente las líneas de los moldes, encargadas de crear las crestas y surcos adecuadas.
¿Qué salsas no faltan en nuestro 'día de la pasta'?
Es cierto que hoy en día el arte culinario nos devuelve todo tipo de innovaciones en la cocina, mezclando ingredientes a priori opuestos y convirtiendo el acto de comer en una experiencia de sensaciones, texturas… Sin embargo, si os digo la verdad, cuando preparo una gran comida para toda la familia o para los amigos suelo tirar de los clásicos, y, por eso, hoy vamos a ver la receta de tres salsas tradicionales para la pasta que nunca fallan. Pero, antes de nada, vamos a ver cómo preparar correctamente la pasta:
Preparación de la pasta
Pondremos agua en una olla, SIN SAL Y SIN ACEITE, y la pondremos a calentar. Cuando esté hirviendo, añadiremos sal gorda y la pasta. Durante los dos primeros minutos tendremos que remover. Pasado el tiempo de cocción necesario para cada tipo de pasta (por ejemplo, en el caso de los tagliatelle serán 8 minutos y en los spaghetti 10 minutos -en cada paquete viene indicado el tiempo necesario-), escurriremos (sin enjuagar con agua) y la volcaremos en la cacerola donde tengamos la salsa.Tip: reservaremos parte del agua de la cocción, por si acaso.
Spaghetti a la carbonara
Ingredientes:
- 400 g de spaghetti Garofalo.- 200 g de papada (o panceta) curada de cerdo.
- 50 g de queso parmigiano reggiano rallado.
- 20 g de queso pecorino romano rallado. También se puede usar queso manchego curado.
- 3 yemas de huevo.
- Un huevo entero.
- Pimienta negra.
Preparación:
1. Comenzaremos dorando la papada (o panceta) cortada en tiras, a fuego lento.2. Batiremos los huevos junto con los quesos rallados y pimienta negra, para conseguir una crema.
3. Mezclaremos la pasta ya cocida y escurrida con la crema anterior, añadiremos la papada (o panceta) aún caliente y, si es necesario, un poco de agua de la cocción. Así, con el calor de la pasta y de la panceta, conseguiremos una consistencia increíble y perfecta, sin que el huevo llegue a cuajar por completo ni a secarse.
Tagliatelle a la bolognesa
Ingredientes:
- 400f de tafliatelle Garofalo.- 400 g de tomate triturado.
- 300 g de carne picada de ternera.
- 30 g de panceta en taquitos.
- ½ vaso de vino blanco seco.
- Una cucharada de cebolla picada.
- Una cucharada de penca de apio picada.
- Una cucharada de zanahoria picada.
- AOVE.
- 40 G de queso parmigiano reggiano.
- Una piza de azúcar.
- Sal.
Preparación:
1. Empezaremos con el sofrito: pondremos en una sartén un chorrito de AOVE y la cebolla picada. Cuando coja color, añadiremos el apio y la zanahoria picada. Cuando esta haya cambiado de color, pondremos la panceta y dejaremos que dore.2. A continuación, subiremos el fuego y añadiremos la carne picada, así no perderá jugos. Después, añadiremos el vino, dejando que evapore. Continuaremos con el tomate triturado y el azúcar (que ayudará a corregir su acidez), y llevaremos a ebullición. Seguidamente, bajaremos el fuego al mínimo y dejaremos espesar, durante unos 40-50 minutos. A la vez, iremos salpimentando.3. Añadiremos la pasta ya cocina en la cacerola, rehogaremos, pondremos el queso y, si fuera necesario, un poco de agua de la que hemos usado para cocer la pasta.
Spaghetti al pesto (de pistachos)
Ingredientes:
- 400 g de spaghetti Garofalo.- 200 g de pistachos sin tostar.
- 35 g de parmesano rallado.
- La ralladura de medio limón.
- Medio diente de ajo.
- 100 ml de AOVE.
- 100 ml de agua.
- 3 hojas de albahaca.
- Sal y pimienta.
Preparación:
1. Empezaremos hirviendo los pistachos (sin cáscara).2. A continuación, batiremos los pistachos, junto con el AOVE, el parmesano, la albahaca, el ajo y el limón. Según vayamos triturando, iremos añadiendo el agua, hasta dar con una crema homogénea.
3. Por último, mezclaremos con la pasta, y serviremos acompañado de pistachos troceados y un poco más de parmesano.
Tres recetas deliciosas, fáciles y con las que disfrutará toda la familia. No sé vosotros, pero en mi casa lo tenemos claro, y por ahora seguiremos confiando en Garofalo para nuestro ‘día de la pasta’. :-)