Una vez terminadas las fiestas se va a la búsqueda de una alimentación mas ligera, al menos para desintoxicar el cuerpo de los excesos a los cuales se vio sometido durante estos días de celebración.
Quisiera poder decir que logro estar un mes entero sin meterme un dulcecito a la boca pero soy una gran golosa y la fuerza de voluntad me abandona casi siempre a mitad camino.
Así que para no sentirme en culpa o al menos no tanta, he preparado estas barritas para mordisquear una vez la abstinencia se hace fuerte.
Cuando se solidifican quedan bien duritas pero son tan ricas que no causa ninguna molestia parecer un perrito mordiendo un hueso... ;)
Ingredientes:
100g de semillas de sésamo
25g de semillas de calabaza
50ml de miel
50g de azúcar moreno
1 cucharadita de aceite de girasol
Preparaciòn:
Tostar las semillas en una sartén por pocos minutos hasta que toman una ligera coloración dorada, reservar. (poner atención por que las semillas tienden a saltar una vez son en contacto con el calor).
En una olla derretir el azúcar y el miel, cuando coja hervor unir el sésamo y las semillas de calabaza.
Cocinar a fuego bajo por 10 minutos.
Verter la preparaciòn en una hoja de papel de horno que hemos engrasado con aceite.
Cubrir la superficie con otra lamina de papel vegetal igualmente engrasada y con la ayuda de un rodillo aplanamos para obtener un extracto homogéneo.
Dejar enfriar por unos 15 minutos y cortamos en rectángulos, dejar solidificar.
Conservar en un contenedor hermético.