Soy fan número 1 de la canela y la mezcla que suele llevar los pasteles de calabaza, el conocido como pumpkin pie spice, lleva una variedad de especias que nos encantan. Las podemos encontrar en cafés, tartas, bizcochos y hasta en velas para el hogar o ambientadores. También se relaciona las elaboraciones con calabaza a la celebración del Thanksgiving Day americano o día de Acción de gracias. Bien sabemos que es una de las tradiciones más importantes en ese país en el que se elabora un gran banquete, estando presente esta hortaliza en pies de calabaza, cremas, sopas y muchas más especialidades que encabeza el famoso pavo en las mesas americanas.
En nuestro caso, siempre hemos tenido esta hortaliza, pero no es tan popular ni tenemos tanto excedente como en otros países. La utilizamos en algunas recetas pero creo que con el paso del tiempo estamos introduciéndola más en nuestro día a día. En mi caso, tenemos siempre de la cosecha de cada año y la troceo y congelo para así poder disponer de ella cuando quiera. Pero es en estos meses cuando más apetecen postres con calabaza, ¿verdad?
En este bizcocho estilo traybake o en bandeja, plasmo todo lo que me encanta. Es un pastel suave, especiado, con calabaza y nueces en la masa. Culmina con un icing que le da un toque más dulce. Es una delicia para el paladar que os invito a probar cuando queráis. Pasamos a la receta!
Ingredientes:
-250 grs. harina de trigo
-200 grs. azúcar moreno
-8 grs. levadura royal postres
-1 cdta. canela en polvo
-1/2 cdta. clavo molido
-1/4 cdta. nuez moscada
-pizca de sal
-60 grs. nueces molidas
-200 grs. puré de calabaza
-2 huevos
-120 ml. Aceite de oliva virgen extra D.O. Sierra Mágina
-50 ml. Leche
Preparación:
En primer lugar tamizamos en el bol de nuestro robot de cocina la harina con la levadura y especias. Añadimos el azúcar y la pizca de sal.
A continuación, agregamos el puré de calabaza asada o cocida bien escurrido. Lo vamos integrando mientras vertemos los huevos batidos.
Luego es el turno del aove y la leche. Lo vertemos en hilo, creando emulsión para que se integre mejor en nuestra masa.
Por último, añadimos las nueces trituradas que le darán cuerpo y sabor crunchy a nuestro pastel.
Engrasamos o cubrimos con papel de hornear nuestro molde rectangular y vertemos la masa. Horneamos a 180 grados unos 40 minutos.
Hacemos la prueba del palillo y retiramos cuando salga limpio y esté dorada la superficie. Dejamos enfriar en una rejilla.
Decoramos con icing y nueces. Para el icing mezclamos azúcar glass en un bol con una cucharada de agua. Iremos alternando estos ingredientes hasta obtener el espesor deseado. Vertemos en hilo con ayuda de una cuchara sobre nuestro pastel. Decoramos con nueces en mitades.
¿Qué me decís de esta receta? ¿Os animáis aprobarla? Es fácil de hacer y el resultado es perfecto para estos meses. No dejes pasar la oportunidad de probar algo diferente o esta versión en bandeja. Muy cómoda para llevar o compartir con los familiares y amigos.
Si os gusta las elaboraciones con calabaza, podéis echarle una ojeada a las cookies americanas con calabaza o las galletas enrolladas que publiqué hace poco. Os fascinará lo deliciosas que están y es que es una dulce manera de comer calabaza por estas fechas.
Un abrazo y nos vemos muy pronto!
Maribel García