Al llevar leche condensada podríamos pensar que podría quedar demasiado empalagoso, para nada es así, el resultado me sorprendió. Tiene una textura muy esponjosa, y una miga super delicada. Es la tercera vez que lo hago en muy poco tiempo y se esta convirtiendo en uno de nuestros bizcochos favoritos. Y lo mejor no tiene ninguna complicación, se prepara en un momento y los ingredientes de estar por casa.
Eso si, si podéis hacerlo en un molde corona mejor, la primera vez lo hice en un molde de cake de esos alargados y me salió un poco mas apelmazado, creo que lo llené demasiado, quizás sea cuestión de llenarlo solo a la mitad. De todas formas las dos veces que lo hice en el molde corona salió mucho mejor.
La receta es de Food and Cook aunque yo le hice algunos cambios, sustituí la mantequilla por aceite de girasol y le añadí mas harina y un yogur. Animaros con el este fin de semana, vais a quedaros con ganas de mas.
Ingredientes:
1 lata pequeña de leche condensada (370 grs.)
4 huevos.
1 yogur griego.
1 envase de yogur de aceite (100 ml.)
160 grs. de harina de repostería.
1 sobre de levadura royal.
Azúcar molida para espolvorear el bizcocho.
Elaboración:
Ponemos la leche condensada en un bol. Vamos echando los huevos uno a uno y batiendo con la batidora eléctrica (yo lo hice en la KA y también lo podéis hacer en la thermomix)
Una vez que los huevos estén integrados, añadimos el yogur y el aceite y seguimos batiendo.
Por último agregamos la harina con la levadura royal, batimos bien y nos aseguramos que no queden grumos. Vertemos la mezcla en un molde corona untado de margarina y espolvoreado de harina.
Metemos en el horno precalentado a 170 grados con calor arriba y abajo durante unos 30 minutos, pinchamos con una aguja y si sale limpia sacamos el bizcocho, dejamos templar y volcamos en unafuente. Espolvoreamos de azúcar molida.
Usé un molde corona de24 cm.