Los ingredientes son de lo más básico así que seguro los tienes por casa y este bizcocho va a hacer que al fin le des salida a ese tarro de miel que está ahí medio escondido en el fondo del armario desde tiempos inmemoriables, igual está hasta cristalizada, sí, sí ..., ¿te acuerdas de aquella vez que tuviste un costipado y lo compraste porque alguien te dijo "toma miel y limón"?, ¿a que sabes de qué estoy hablando ...?.
Menos mal que la miel prácticamente no caduca y además ahora viene con ese tapón dosificador antigoteo o como yo digo "antimosqueo" porque menudo pringue se montaba una antes ..., te ponías a coger el tarro y acababas toda pegajosa de la miel que se te había salido la última vez, ¿a que a ti también te ha pasado?, ufff ... ya se te quitaban hasta las ganas de tomártela.
Espero que todo esto no te haga desistir, esta nueva modalidad de tomar miel y limón te va a enamorar, es un bizcocho húmedo y aunque a priori pueda parecer lo contrario, nada empalagoso, no sabe ni a miel, ni a limón, pero al mismo tiempo sabe a ambas cosas, no se cómo explicarte, mejor lo pruebas.
¿Te he conseguido convencer de que este bizcocho es una buena opción?, si es así ya es hora de ponerse manos a la miel.
TIPS:
Molde: redondo de 20 cm de diámetro
Temperatura del horno: 180ºC con calor arriba y abajoINGREDIENTES (todos a temperatura ambiente) :
135 g de mantequilla sin sal
100 g de miel
2 huevos
100 ml de leche desnatada
170 g de harina con levadura
1 limón
azúcar glas (para decorar)MODO DE PREPARACIÓN:
Precalentamos el horno y engrasamos o forramos el molde con papel vegetal .
Batimos la mantequilla unos 5 minutos hasta que esté cremosa, le añadimos la miel y mezclamos bien.
Incorporamos los huevos de uno en uno mientras seguimos batiendo.
Añadimos la leche y cuando ya esté todo bien mezclado incorporamos la harina tamizada mezclando con una espátula de silicona.
Por último incorporamos el zumo y la ralladura del limón y mezclamos otro poco con la espátula hasta que estén bien integrados y tengamos una masa homogénea.
Vertemos en el molde y horneamos durante 30-35 minutos aproximadamente.
Aunque utilizamos harina con levadura no te asustes si ves que no sube, este bizcocho es así, bajo y planito.
Sacamos del horno, esperamos unos minutos, desmoldamos y pasamos a una rejilla para que se enfríe por completo.
Una vez frío espolvoreamos por encima con azúcar glas.
Ya tienes la receta, imagino que estarás con las manos en la masa, así que sólo me queda desearte que te guste y lo disfrutes.