Una receta de repostería norteamericana, clásica allende los mares, no tan popularmente extendida aquí, pero que está buenísima y merece la pena hacerla. No quedarán ni las migas, desaparecerá visto y no visto. Así me lo aseguró una amiga americana que tengo, y así es. Ella me dió esta receta hace ya bastante tiempo y yo le hice alguna adaptación personal, como la cubierta de chocolate.
Los plátanos mucho mejor si son de Canarias, son más dulces y tienen más sabor. Este bizcocho sale mucho más rico si los plátanos están muy maduros.
Ingredientes:
250 gr. de harina de repostería
50 gr. de cacao en polvo
150 gr. de aceite de girasol (o mantequilla)
180 gr. de azúcar
50 gr. de nueces picadas
4 huevos
4 plátanos muy maduros
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 sobre de levadura tipo Royal (15 gr.)
Cobertura:
90 gr. de chocolate de cobertura
40 gr. de margarina
1 cucharada de azúcar glass
guindas rojas (opcional)
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180º.
Machacar los plátanos hasta hacerlos puré, reservando medio plátano para la decoración.
Mezclamos en un bol la harina (con una pizca de sal), el cacao y la levadura. Añadimos las nueces picadas.
En un recipiente batimos con las varillas el azúcar y los huevos, hasta que blanqueen y aumenten de volumen. Agregamos el aceite, la esencia de vainilla y el puré de plátanos. Lo batimos todo bién. Si tienes la Thermomix, todos estos pasos lo puedes hacer en el vaso, añadiendo los plátanos al final y triturando todo.
Volcamos este batido en el bol que contiene la harina y mezclamos con una espátula hasta que la harina está integrada, pero sin insistir demasiado. No importa que quede un poco grumoso.
Lo volcamos en un molde de cake y lo horneamos durante 35 minutos.
Esperamos 5 minutos y lo desmoldamos.
Para hacer la cobertura, ponemos en un bol el chocolate troceado, la margarina y la cucharada de azúcar glass. Si nos apetece, añadimos también una pizca de canela en polvo. Calentamos en el microondas durante 40 segundos. Removemos y dejamos enfriar un poco para que coja consistencia.
Extendemos el chcolate por la parte superior y los laterales.
Adornamos con las rodajitas de plátano reservadas y unas guindas cortadas por la mitad.