Este bizcocho le preparé el otro día y era uno de esos que llevo tiempo queriendo hacer pero por unas cosas u otras al final no le había dedicado el tiempo. Es un bizcocho muy lucido y aunque parece difícil de hacer nada mas lejos de la realidad, y si no sigue leyendo y veras cual es el truco.
Aunque sea verano también enciendo el horno, pero en la finca, porque como estamos en la pisci o fuera jugando con los niños o haciendo mil cosas, el calor del horno no nos afecta. Si no tienes esa suerte puedes guardarte la receta para prepararla en otro momento, o cerrar la puerta de la cocina. Pero no dejes de prepararla porque sé que os va a encantar.
INGREDIENTES (molde 20cm):
250 gr harina
50 gr almendra polvo
175 gr azúcar
150 gr aceite girasol
250 ml leche
3 huevos
15gr levadura
3 cdas cacao puro polvo
PREPARACIÓN:
Separamos las claras y las yemas.
Montamos las claras con una pizca de sal a punto de nieve, después agregamos el azúcar como lluvia hasta integrar.
Después añadimos las yemas una a una, hasta que no esté bien integrada la primera no incorporamos otra.
Ahora es el momento del aceite que sin dejar de batir añadimos en forma de hilillo.
La horchata o la leche también se añade ahora y ya solo queda la harina tamizada junto con la almendra y la levadura, se añade e incorpora con cuidado para no bajar el aire.
Separamos la masa en dos boles, en uno agregamos el cacao y mezclamos bien. Ahora metemos las dos preparaciones en magas desechables, engrasamos un molde redondo y ponemos papel.
Cogemos una masa y hacemos un punto en el centro, después con la otra masa también desde el centro vertemos masa, asi una y otra vez, la masa se extiende hacia los laterales quedando como círculos.
Metemos en el horno precalentado a 180ºC durante 35 minutos.
Besines,