y el porqué de su nombre. Y aquí llego yo, a poner el contrapunto a ese blog tan inmaculado, blanco y "frio" con este volcán de chocolate negro y caliente, toda una explosión de texturas y sabor para el paladar e ideal para acompañar con un heladito de vainilla, por ejemplo. Aquí hago un inciso para decir que entrecomillo la palabra "frio" porque nada más lejos de la realidad, IGLOO COOKING es un blog de lo más acogedor, cálido y Nieves de lo más cariñoso que hay por la blogosfera. Y al hilo del frio y el calor, y como mandan las bases del concurso, contaros que vivo en Sevilla, donde el calor, sobre todo en Julio y Agosto es insoportable. Solemos viajar en Agosto por motivos laborales y normalmente buscamos destinos frescos para huir del calor de esas fechas. Pues bien, hace unos años decidimos viajar a Suecia, donde nuestro Agente de Viajes nos aseguró que en Agosto las temperaturas máximas no sobrepasan los 25 grados. "El paraíso"; pensamos, y allí que nos encajamos, buscando el fresquito, el taparnos con una mantita por la noche, usar una rebequita por la tarde y visitar a Pippi Langstrum, heroína de mi infancia....Y UNA ***! Ese verano no bajaban de 40 grados en Estocolmo. Ni los restaurantes, ni los transportes públicos, ni los hoteles evidentemente están acondicionados para el calor, por tanto no tenían aire acondicionado y para más INRI, en el hotel ultramodernísimo todo de cristal donde nos alojabamos no se podía abrir la ventana. NOS ÍBAMOS A MORIR!!!. Así que esas vacaciones las recordaremos toda la vida como la más calurosa de nuestra historia, pero descubrimos un país fascinante, que nos enamoró y al que no descartamos volver algún día.
Ingredientes para hacer el volcán de chocolate:
115 grs. de chocolate negro (en mi caso de cobertura de Lidl) 115 grs. de mantequilla 100 grs. de azúcar glass 3 huevos tamaño "L" 90 grs. de harina PREPARACIÓN:
En un bol, mezclamos el chocolate y la mantequilla y los metemos en el microondas 1 minuto más o menos hasta que la mantequilla esté totalmente derretida, mezclando seguidamente con unas varillas hasta asegurarnos que no quedan grumos de chocolate. Añadimos el azúcar y mezclamos hasta formar una pasta homogénea. Incorporamos los huevos y la harina y lo integramos muy bien. Echamos la mezcla en unos moldes individuales previamente engrasados, no llenándolos hasta arriba, ya que crecen un poco. Metemos los moldes en el horno precalentado a 220º unos 10 minutos, tiempo suficiente para que se cuaje por fuera pero quedando líquido por dentro. Sacamos los moldes del horno y dejamos reposar un rato hasta que temple. Desmoldamos con mucho cuidado, pasando incluso un cuchillo por los bordes si es necesario, para despegarlos. Servir boca abajo en platos individuales de postre y acompañar con lo que nos apetezca. Fuente: http://www.aishakandisha.com