La receta original, del chef francés Michel Bras, era más laboriosa, ya que llevaba dos capas, pero surgieron muchas versiones, y yo os traigo una de tantas.
Con las cantidades que os dejo, nos darán para 9 moldes de magdalenas, o si los preferís un poquito más grandes, para 4 flaneras.
Ingredientes:
125 g. de chocolate para postres
4 huevos
75 g de harina
75 g de mantequilla
75 g de azúcar
Cacao en polvo o harina
Lo primero que vamos a hacer es derretir el chocolate y la mantequilla, para que se nos vaya templando. Podemos hacerlo en el microondas o al baño María; si usáis el microondas, lo mejor es en la opción descongelar, durante un minuto aproximadamente, así es más difícil que se nos queme.
Por otro lado batimos bien los huevos junto con el azúcar; añadimos el chocolate y la mantequilla, una vez templados, y mezclamos bien, hasta que nos quede una mezcla homogénea.
Repetimos la operación con la harina.
Engrasamos nuestros moldes con un poquito de mantequilla o aceite de girasol, y los espolvoreamos con cacao en polvo, o si no tenéis, con harina, así evitaremos que se nos pegue el bizcocho y desmoldaremos mejor.
Rellenamos los moldes casi hasta arriba, dejando como medio centímetro o uno, hasta el borde.
Debemos dejarlos reposar al menos 2 horas en el congelador. Cuando vayamos a hornearlos, precalentamos el horno a 200º, los sacamos 5 minutos antes y horneamos durante 10-12 minutos. Dependerá de cada horno, os recomiendo que la primera vez hagáis pruebas con un coulant para comprobar el tiempo que necesitáis. Lo ideal es que se quede líquido el centro, pero si lo preferís más hecho, solo debéis dejarlo un poquito más (un minuto aproximadamente) o viceversa, si se quedó demasiado hecho.
¡Buen provecho!