Lo maravilloso de estos bowls es que combinan una comida completa, con técnicas de cocción muy simples para varios de los alimentos, que se amalgaman gracias a un aderezo que unifica al conjunto y le aporta sabor al plato.
En esta oportunidad les presento una budah bowl con estilo y sabores asiáticos, que como saben me encantan, y que van muy bien con los vegetales crudos y el arroz, aportándole ese Rock´n roll que necesitan estos sabores suaves de base.
Ingredientes:
Arroz frió y cocido del día anterior
garbanzos salteados con un poco de cúrcuma y pimiento seco (dejar los garbanzos a temperatura ambiente)
pepino cortado en cubos
celery o apio en trocitos
nabos cortados en cuadritos
hojas de espinaca salteadas con un poco de semillas de ajonjolí y sal
coco seco y semillas de ajonjolí para espolvorear todo
Para el adrezo con el toque de sabor asiático use: 1 cda de pulpa de tamarindo previamente diluida en agua. (si no consiguen tamarindo o nos les gusta pueden sustituirlo por ralladura de limón y jugo de 1 limón), un trozo de jengibre fresco, pelado y rallado, algunos dientes de ajo, salsa de soya.
En un mortero triture los ajos y el jengibre, al obtener una pasta le agregué la pulpa de tamarindo con el agua en la que estaba y continué mezclando. Añadí la salsa de soya y un poquito de aceite de soya.
En este aderezo se conjugan sabores ácidos, picantes y salados, y todos ellos van a impregnar a nuestro delicioso bowl. En este caso la proteína es de origen vegetal y está conformada por los aminoácidos presentes en el arroz mas los presentes en los garbanzos.
Se disponen los vegetales por grupos dentro del bowl, cada grupo al lado del otro, se espolvorea con semillas de ajonjolí y coco y se vierte el aderezo.