Los calissons son unos dulces de origen francés y de reciente descubrimiento para mí. Me recuerdan a los mazapanes, pero más finos. Tienen un sabor ligeramente afrutado y cubierto de glasa, me parecen muy ricos. Es por ello que lo he elegido como desayuno navideño
Ya te adelanto que para empezar el día soy más de brioche, o bizcocho, incluso últimamente muy de pan con aceite. Pero como estamos en estas fechas tan propias de excesos y azúcar, pues a darle al calisson :) Y si por la mañana no te entran, hazme caso y prepáralos para el cafecito de después de comer.
Para preparar unos 30 calissons, necesitarás:
– 250 gramos de almendra molida
– 95 gramos de azúcar glas
– 50 gramos de miel
– 100 gramos de melón confitado
– 60 gramos de naranja confitada
– 1 cucharada de postre de agua de azahar
– 50 gramos de agua
– obleas (opcional)
Para la glasa que lo cubre:
– 30 gramos de clara de huevo ( una clara)
– unos 180 gramos de azúcar glas
La preparación es muy sencilla, mira:
Pon a calentar el agua con el azúcar, la miel, y el agua de azahar. No hace falta que hierva, sólo que se disuelvan los ingredientes.
Incorpora la fruta confitada, y tritura.
Añade la almendra molida y mezcla bien todo.
Extiende la pasta entre dos hojas de papel sulfurizado, y con un rodillo déjalo de un grosor de 1 cm. aprox. Si quieres usar las obleas, son para poner como base, y depositar la pasta encima.
Deja que se seque la pasta durante unas horas. Uno ó dos días, o una noche sin la capa de papel superior.
Con un cortapastas, procede a cortar la masa en la forma que desees. Lo típico es la forma de rombo, y de tamaño pequeño ya que es muy dulce. No queremos raciones demasiado grandes que nos saturen. Mejor repetir, si acaso ;)
Esta tarea es para hacerla sin prisa y con paciencia. La masa estará un poco pegajosa, por lo que hay que limpiar con agua cada dos o tres piezas que cortes.
Ve dejando las piezas sobre una bandeja plana forrada de papel de hornear.
Prepara la glasa como te expliqué en la receta de las casitas de jengibre.
Cubre con el glaseado, bien con una manga o con un cuchillo. Vuelve a depositar sobre papel sulfurizado.
Venga que yo ya tengo el café preparado y el desayuno listo, ahora te toca a ti. Lo de ponerte en modo navideño ya es cosa tuya, en casa las peques mandan. Este año pusimos el árbol a finales de noviembre, antes que nunca, pero en el blog me he resistido hasta diciembre. Ya no he podido más. Pero bueno que si tu te resistes, creo que en Francia se comen los calissons en cualquier época. Y si no, siempre te puedes dar a las magdalenas, bizcochos, o a las tartas de chocolate. Será por opciones :)
¡Feliz y dulce domingo!
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