Podríamos pensar que los canelones son más o menos como los espaguettis o macarrones, pero al llevar la bechamel, y gratinar al horno, es pasta pero es otra cosa. Más completa, más currada para mi gusto. En una comida para mucha gente, hacéis una bandeja grande y triunfáis seguro.
Vamos a ello:
INGREDIENTES (para 4 personas):
- 20 Placas de canelones. A mí me gustan de los precocidos, del Pavo, o Gallo. Calculad que cada persona se come unos 4 ó 5 canelones, y vale más que sobre, que luego se pueden guardar.
- 4 latitas de atún. Un consejo: si váis a hacerlo para mucha gente, no compréis las latitas pequeñas, haceros con una grande mejor.
- 4 huevos. Suelo poner uno por persona, pero si se baja un poco, no pasa nada. - 1 Bote de tomate frito. Mi favorito es de la marca Hida (toma propaganda).
- 2 Cebollas grandes, tiernas mejor.
- Queso para gratinar
Para la bechamel:
- 2 cucharadas soperas de harina
- Aceite o mantequilla
- Leche
- Sal
- Nuez moscada Empezamos poniendo a remojo los canelones, según las instrucciones. Suele ser 20-30 minutos en agua caliente. Cuando pase el tiempo, poner en un paño de cocina a escurrir. Ponemos los huevos a hervir en un cazo con agua y sal, unos 10 min. hasta que estén duros. Picamos la cebolla a trozos pequeños, y la pochamos en una sartén, es decir, la freímos hasta que esté transparente. Cuando esté, añadimos el tomate frito, y vamos moviendo a fuego lento. Cuando estén duros los huevos, los pelaremos y mezclaremos con el atún al que habremos escurrido el aceite. Esta mezcla la añadiremos a la cebolla y tomate. Le damos unas vueltas en la sartén para que se mezcle todo. Corregimos de sal según el gusto. Con la mezcla habrá que rellenar los canelones, es muy fácil: con un plato bajo, ponemos el canelón, le echamos relleno, calculando para que cierre bien y no se salga, se cierra a lo cigarro liado (cigarro eh!) y lo colocamos en la bandeja con el "cierre" hacia abajo para que no se abra. Los colocamos todos juntitos en una bandeja. Ahora la bechamel: es muy fácil de hacer, sólo hay que pillarle el trankillo: En una sartén con aceite o mantequilla caliente (como dos cucharadas), echamos la harina y vamos tostando. Tiene que haber proporción de aceite-harina, que se queden como unas migas o gachas. Lo tenemos que tostar un ratillo, moviéndolo, a fuego medio. Cuando esté tostado (yo lo se porque huele a palomitas ;-P), echamos poco a poco la leche removiendo sin parar. La cantidad de leche depende de si queremos la bechamel más o menos espesa. Es mejor echarla poco a poco, porque si nos pasamos no podremos añadirle harina cruda... ok? Si os pasa como a mí, que os da pereza remover, y remover para deshacer los grumos, acabamos antes si lo batimos un poco con la batidora, queda mejor. Aquí falta leche!
Sólo nos queda echar la bechamel por encima de los canelones, echar el queso de gratinar, si queréis un poquitín de pimienta negra en polvo, y al horno! Unos 20 minutos, 180º a altura media para que se hagan, y los últimos 5 de gratinar, hasta que se dore.
Ojo cuando los sirváis, que no se destrocen mucho como a mí, me he tenido que poner una foto de interné!! xD
Espero que la hagáis, es mucho más ligera que los de carne, y así comemos un poco de pescado...
Si tenéis dudas...... a comentar!!