¡El último éxito en las cenas! Fácil y muyyyyy resultón. La idea la cogí cuando fuimos a cenar al restaurante de Sergi Arola. Nos gustó tanto que tuve que intentar hacer mi re-interpretación del plato, sin llegar a su calidad por supuesto. Pero la verdad que se acerca bastante al sabor que recuerdo.
Ingredientes (para dos raciones):
Champiñones portobello. Una bandeja de 250gr.
Una tarrina de mousse de queso de trufa (Philadelphia).
Parmesano rallado.
AOVE
Lavamos los champiñones en un bol con agua templada y boca abajo, para que caiga la arena que todavía puedan tener. Seguidamente, se ponen encima de un trapo para que absorba la humedad. En caso de quedar arena, se puede realizar la operación tantas veces se necesite.
En el plato donde lo vayamos a servir untamos con un pincel la mousse de trufa. En la receta origina, la trufa se ralla por encima del portobello, pero esta es la versión asequible del plato.
Cortamos el portobello lo más finito que se pueda, sin que se parta y que sea fácil de coger con un tenedor. Lo colocamos encima la mousse. Rociamos con un chorro de AOVE y espolvoreamos el parmesano por encima.
El resultado de la combinación de sabores os va sorprender muchísimo. Además el portobello, a diferencia de lo que pueda parecer, no es un hongo caro. Te puede salir por poco más que un champiñón normal, pero el sabor es más intenso. ¡Qué aproveche! Smacznego! Bon appétit! Enjoy it!