La ventaja que tiene la cebolla caramelizada en la cocina, es poder acompañar y decorar cantidad de platos. Me planteé hacer una receta de cebolla caramelizada a la que no hubiera que añadir azúcar.
Cómo hacer cebolla caramelizada sin azúcar añadido Después de investigar y probar diferentes técnicas, me decanté por caramelizar la cebolla con su propio jugo. Hacer una receta de cebolla con su propio azúcar, le confiere una forma natural de consumir una hortaliza dulce sin azúcar añadido. Por otro lado tiene la ventaja de que es muy rápida de elaborar.
Para este tutorial me he servido de los siguientes
Ingredientes
Cebollas grandes: 6
Aceite de Oliva virgen extra: 4 cucharadas
Agua
1 Pizca de Sal
Preparación de la cebolla caramelizada paso a paso
Las cebollas las cortamos tipo juliana, en láminas al hilo de cada cebolla.
El agua la vamos a utilizar a discreción, la suficiente para caramelizar la cebolla.
Colocamos una sartén al fuego, y en la misma echamos aceite de oliva.
Agregamos la cebolla a la sartén, una vez echado el aceite, también le incorporamos sal
La cebolla se va cocinar en su propia azúcar, y el fuego va a estar medio-alto.
Se deja pochar las cebollas después de marearlas y reducimos el fuego. En la vitrocerámica la he dejado en el 6 .
Se incorpora un poco de agua, con dos objetivos, uno que no se peguen las cebollas laminadas; dos que se vayan caramelizando.
Has de procurar que la cebolla adquiera un color dorado, porque será signo de que la cebolla la estás caramelizando, sin necesidad de añadir ningún tipo de azúcar. En consecuencia, iremos moviendo las tiras de cebolla en la sartén, hasta que adquiera aquel color.
Has de añadir el agua suficiente, para que la cebolla no se pase.
Cómo saber si la cebolla caramelizada está terminada
Para ello, sólo basta ver que ha cogido un tono caramelo, nunca que esté tostado. Controlando los tiempos, tienes una receta de cebolla de forma rápida con el que decoraras cantidad de recetas. Puedes servirla caliente o fría, aunque te recomiendo que la sirvas fría. No obstante también depende con qué receta la combines. Si la acompañas por ejemplo a unas carrilleras de cerdo, puede ser que esté mejor caliente. La norma plato caliente, cebolla caramelizada caliente.
Te recomiendo que la hagas. La elaboro con frecuencia, de esta forma, sin azúcar y no veas lo sabrosa que está y la textura que tiene. Incluso podrías hacerte un bocadillo de cebolla.